Para combatir el antisemitismo no hace falta ser judío, como para luchar contra el racismo no hace falta ser negro. Lamentablemente, a veces parece que para combatir la discriminación de la mujer hace falta ser mujer. (Soledad Gallego-Díaz)
Como sabéis, me autoproclamo feminista (y creo que todas deberíamos de autoproclamárnoslo). Porque como sabréis (espero) el feminismo proclama la igualdad, no es un pensamiento radical ni horrible, y me gustaría poder lanzar algo de luz sobre el asunto.
Como dije el año pasado, como digo siempre, dejemos de pisotearnos unas a otras, dejemos de tirarnos piedras a nuestro tejado. Algunas; dejad de ser más machistas que muchos hombres, valorémonos a nosotras mismas, y no dejéis que os pisotee nadie; ni hombre ni mujer. Este año está siendo especialmente "extraño" con toda la ley del aborto (no profundizaré sobre ello, porque creedme; me enciendo sola y me pongo de muy mal humor) pero supongo que sabréis qué tipo de opinión tengo.
No hay barrera, cerradura ni cerrojo que puedas imponer a la libertad de mi mente (Virginia Woolf)
Me gustaría dejar a continuación un video en el que Clementine Cannibal lee un texto (escrito por ella misma en su fanzine), que aunque hay gente (chicas, extrañamente) que no les convence, a mí me parece un manifiesto feminista en el que Clementine expone unas ideas muy claras y defiende que cada una de nosotras seamos y hagamos lo que nos salga de nuestro -con perdón- coño.
Ninguna mujer tiene un orgasmo abrillantando el suelo de la cocina (Betty Friedan)