Caminando por el bosque, siguiendo el arroyito hacia el rìo, entre las plantas desnudas de invierno va Felìz con su caperucita azul.
A veces el frio entra en los organos, confirmando su existencia, y te sentis lucida, invencible. En cada agujerito que el cayado fora en la tierra helada crece urgente la palabra: SOBERANA.