En diciembre le hice exámenes de rutina a mi hijo.Fue una semana ajetreada. Valió la pena ser tan enojona,con lo de la comida. Raúl,no come frutas ni verduras,ni carne.Y aunque antes le daba las comidas con todo,pasadas por la juguera,llegó un tiempo en que notaba el sabor y no había caso que la comiera.Que no "soy vaca"para comer verduras.Que las frutas "me dan vómitos espantosos",Que no "me gusta la carne y punto.No la pienso comer".Y así,siempre. Han sido años difíciles,pero al fin voy viendo resultados y aunque no comerá normal,por que ya no hay caso,lo poco que come le ayuda:arroz,fideos,pollo asado-a veces-,puré,yogurt,pan,margarina,manjar,mayonesa con el arroz,uf!.A veces se cierra,como hoy,porque solo le di un vaso de bebida. Se enoja,pero no quiero que le de diabetes,a si que en este sentido no me importa su enojo,aunque me diga que "me iré al maldito infierno". Lo bueno de todo,es que de vez en cuando,podrá seguir disfrutando de los helados y golosinas,que le encantan. Estoy feliz...
El jueves,fuimos a ver los exámenes y todo salió perfecto:sin diabetes,ni epilepsia,ni colesterol alto,ni nada.