Feliz semana (ii)

Sigue…

…el primer mundo ha reconocido su responsabilidad ante el tercer mundo; los conflictos bélicos de todo tipo han sido eliminados por armisticios y, como compensación, se han facilitado alimentos, se han rehabilitado los lugares y bienes destruidos, con fondos provinientes de la mafia internacional, de los gobiernos corruptos y de los millonarios de este primer mundo; los plenipotenciarios laboratorios farmacéuticos que vivían generando y manteniendo enfermedades, han regalado medicamentos en los países con hambruna y epidemias, del primer y tercer mundo; los países que proclaman la libertad y la democracia en todo los paises de este mundo han decidido predicar con el ejemplo; los jueces que dicen que son independientes y actúan bajo consignas políticas de quienes los nombraron han dimitido y se dedican a hacer labores sociales, restableciendo la verdadera justicia; los padres y educadores han decidido por fin aprender de los niños; los habitantes del mundo han decidido preservar la Naturaleza y dejar de servirse de ella, destruyéndola; todos los investigadores del mundo avanzado han decidido dejar de surcar el espacio y retar al Universo, con el fin de invertir su sabiduría y conocimiento en mejorar el mundo concreto y cercano que nos rodea; los familiares de los gobernantes y monarquías dejan de lucrarse del tráfico de influencias y se ponen a trabajar; la cultura y la educación se han convertido en la piedra angular de la verdadera democracia; los ancianos del mundo civilizado han sido por fin exaltados y dignificados por los servicios prestados, además de ahora considerarlos sabios a quienes los jóvenes recurren en busca de consejo para su vida; las iglesias han olvidado sus doctrinas inhumanas, oligárquicas y rígidas para retornar a sus origenes y velar por la espiritualidad de todos los seres humanos, sin excepción; los organismos internacionales han dejado de hacer política o venderse a quien los paga y ahora se dedican a mejorar el mundo, entendiendo que la unión hace la fuerza; los hombres y mujeres prepotentes, soberbios y vanidosos se convierten en personas cordiales, como padres, maridos y esposas, hijos o profesionales; el presupuesto mundial en armamento de los diferentes paises desarrollados desaparece de los presupuestos y se destina a la educación de los niños; los paraísos fiscales de todo el mundo desaparecen, dejando de cobijar anónimamente la riqueza de los poderosos y corruptos; a los niños se les escucha y se les quiere, como merecen; el futbol deja de ser una cuestión de Estado y los mejores futbolistas cobran lo mismo que un maestro de escuela; los políticos son un ejemplo de honradez, ética y un modelo de persona y ciudadano a imitar; las televisiones de todo el mundo son formativas e informativas; la gente por la calle sonríe, sin más; los empresarios valoran el talento de los empleados; todos los profesionales intentan aportar lo mejor de sí mismos y así mejorar el mundo, sea cual sea el trabajo que hagan; el deporte deja de ser un negocio y abandona el doping y otras prácticas oscuras que lo envilecen; la mujer deja de ser maltratada y sometida, haciéndose respetar; los viejos paradigmas del Sistema desaparecen y se potencia la humanidad y sus valores en un nuevo Sistema; los seres humanos se valoran en función de sus valores y no de su poder, cargo o patrimonio; dejan de existir inmigrantes, refugiados de guerra y excluídos sociales y todos ayudamos a todos a vivir la vida que todos merecemos; los sindicatos del mundo entero empiezan a defender de verdad el derecho de los trabajadores; los pederastas, delincuentes, maltratadores y ladrones de guante blanco se entregan a la justicia y se les impone trabajo social ayudando a sus víctimas; los médicos dejan de crear enfermos y se dedican a curar de verdad; se acepta la diversidad y la singularidad de los individuos, sean de la raza, el color y clase social y económica que fueren; con el dinero del rescate de los bancos se financian viviendas nuevas para los ciudadanos que fueron deshauciados; los mayores de más de 45 años vuelven a ser valorados por las empresas por su dilatada experiencia; los excedentes de alimentos del primer mundo, en vez de ser destruídos se envían al tercer mundo; crece la economía industrial y disminuye la economía financiera y la especulación; se hacen solo las leyes  razonables y que se pueden hacer cumplir; se reconoce y premia públicamente a los honestos y que ayudan a los demás…

Seguirá…

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