Con mucha pena en el corazón tengo que decir que han desaparecido las fotos del último día, me da una pena horrorosa, en ellas estaban Ana Iturgaiz, Pilar Cabero y Luz Gabás, además de las fotos de la Noche en blanco de Alcalá con Alejandro Palomas. Si aparecen en algún momento editaré para incluirlas, pero ya tengo pocas esperanzas de recuperarlas.
Vayamos a lo bueno y dejemos lo malo de lado.
Primer día de visita a la feria.
Al primer sitio al que voy porque veo que ya hay una buena cola es a la caseta donde está Màxim Huerta. Ya le visité el año pasado para que me firmara Una tienda en París y este año he vuelto porque el día de la madre me regalaron La noche soñada, así que ya lo tengo dedicadito por el autor. Màxim estuvo encantador, como siempre.
Después nos fuimos a ver a Susana Cañil, que presentaba su primera novela Espérame en París. Fue un placer conocerla, tanto a ella como a su hija, que además de encantadoras son guapas a rabiar. Nos reimos un rato posando para unas fotos y me llevé a casa el cd que acompaña al libro con música francesa, ¡me encanta!. Espero que nos volvamos a ver, en este caso, en mamá framboise, que será un encuentro más dulce.
Y ya de paso, como sabía que iba a estar firmando el gran Alberto Vázquez Figueroa, me llevé la trilogía Océano a firmar, que es ni más ni menos un regalo que le hice a mi sobrina Yaiza, que se llama como la protagonista. Pasé un rato agradable, mientras firmaba los libros me iba contando anécdotas sobre esa trilogía y el nombre de Yaiza. Desde luego una persona entrañable y maravillosa.
Y corriendo y sin esperanzas de poder verla me fui a la caseta donde estaba Sarah Lark, se supone que estaba hasta las dos de la tarde y ya eran las dos y cinco pasadas cuando llegué. Allí me recibió con una sonrisa, es encantadora. Iba anotando las personas que pasaban a por su firma en la caseta, me dijo que era la número noventa. No me extraña, ha sido un placer conocerla.
Segundo día en la feria.
El segundo día fui con una amiga y terminamos agotadas, la mayoría de los autores firman en un ratio de dos horas, durante ese tiempo firman todos a la vez y si hay varios de ellos que tienen cola es imposible visitar a todos, así que este día íbamos con la agenda muy apretada para esas dos horas. Pero nos dio tiempo a todo, corrimos, eso sí, pero al final nos pudimos hasta tumbar un ratito en el césped.
Para empezar, y como teníamos la suerte de que firmaba media hora antes que el resto, nos fuimos a ver a Laia Soler, autora de Los días que nos separan, ganadora de la primera edición del Premio Literario Plataforma. La otra chica joven que se ve al fondo es la ganadora de la segunda edición, es Andrea Tomé, autora de Corazón de mariposa. Como llegamos pronto no pusimos a la cola y en un momento se formó una cola tremenda, vinieron los de seguridad a poner vallas y a coordinar las colas. Justamente ese día era la blogger lit, en la que ser reúnen bloggers literarios de todas partes y estas dos autoras son muy queridas dentro de ese mundo. Laia me dedicó el libro a mi hija y a mi, la protagonista de su libro se llama Abril, al igual que mi hija, así que lleva doble dedicatoria, aunque justamente ese día no me acompañaba mi hija.
Y nos vamos a la caseta donde iba a firma Lena Valenti, en la que ya esperábamos colas tremendas. Llegamos pronto y ya había cola, vallas y personal de seguridad. Nos pusimos a la cola y a esperar, había oído que Lena Valenti se toma tiempo con sus fans y he comprobado que así es, a pesar de tener poquitas personas delante, estuvimos en total ¡1 hora y media!. También hay que reconocer que no estuvo mal, había muy buen ambiente, las chicas que estaban a nuestro lado eran muy majas y terminamos charlando con la gente de la fila y luego cuando nos tocó a nosotras también se tomó su tiempo y fue encantadora. Tengo que decir que es muy simpática, tiene un gran sentido del humor y nos echamos unas risas. Fue un placer conocerla. Me llevé Panteras a mi casa.
En una caseta cerquita de donde estábamos se encontraba Eloy Moreno. También le visité el año pasado con El bolígrafo de gel verde y este año he vuelto con su nuevo libro Lo que encontré bajo el sofá. Como siempre Eloy es una persona sencilla, muy de andar por casa, con quien da gusto compartir unas palabras. Y hala, ya tengo sus dos libros firmados.
Y a correr entre la multitud porque habíamos gastado casi todo nuestro tiempo con Lena Valenti y no me pensaba ir sin ver a Victoria Álvarez. He tenido la suerte de ganar en un sorteo el libro de Tu nombre después de la lluvia y me ha encantado, tras ese me he leído Las eternas y ahora me he comprado para llevar a la playa el que me faltaba, Hojas de dedalera. Aunque se nota que ha ido mejorando y perfeccionándose mucho libro tras libro, me encanta su estilo y su forma de escribir. Tengo que decir que además de ser un fenómeno como autora, es bellísima, de esas personas que te dejan con la boca abierta con su belleza y además con su dulzura. Se le escapó algún secretillo del próximo libro que no voy a ser tan malvada de desvelar, me lo guardo para mí. Solo que sepáis que en enero de 2015 sale su próximo libro donde seguiremos disfrutando de los protagonista de Tu nombre después de la lluvia.
Y al final, nos sobraban 10 minutos, tenía programado ir a ver a Raquel Martos al día siguiente pero como había la posibilidad de que llegásemos a tiempo, allí que fuimos. Me encanta cuando voy a ver a un autor y me reconocen y Raquel Martos así lo hizo. Fue un inmenso placer charlar sobre sus libros y compartir mutuamente la carga de sentimientos que afloran con ellos. Incluso Raquel se emocionaba al explicarme cosas de Los besos no se gastan y yo me emocionaba al escucharla, estoy segura que no lloró ni una lágrima menos al escribirlo que nosotros al leerlo. Una agradable sorpresa, primero su obra me sorprendió gratamente y luego lo hizo su persona. Tengo pendiente leer su nuevo libro No pasa nada y si pasa, se le saluda.
Tercer y último día en la feria.
Iba con mi marido y mis dos hijos, teníamos mucha prisa y fuimos todo lo rápido que pudimos. Empezando visitando a Luz Gabás, con la que también repetía. El año pasado me firmó Palmeras en la nieve y este año llevé Regreso a tu piel, que me habían regalado para mi cumpleaños. La suerte de que llegamos y no había nadie delante, pero cuando me fui me dio vergüenza ver la cola que se había formado detrás de mí. También resultó agradable que Luz Gabás me recordara (también a mi hija) y estuvimos charlando un ratito, como ya os dije el años pasado es encantadora, es un placer charlar con ella, además de toda su grandeza como autora, es una persona sencilla con la que da gusto hablar de cualquier cosa. Fue un gran placer volver a verla, y como os decía, se formó una buena cola, ¡ups!, disculpas a los que les hice esperar.
Después de ver a Luz Gabás, nos fuimos a ver a Ana Iturgaiz y Pilar Cabero, que estaban juntitas en la otra punta de la feria. Por el caminos vimos muchos autores conocidos firmando, saludamos de nuevo a Raquel Martos que estaba tan contenta con la victoria de Nadal, y pude ver lo guapísima que es Silvia Abascal, me encanta esa mujer, estaba firmando su libro con esa sonrisa tan dulce que la caracteriza.
Había varias colas enormes, las más tremendas eran para los de Masterchef y para Forges, vallas y vallas de colas. Luego las típicas colas de siempre, algunas más largas y otras más cortas. Para quien nunca haya ido, que no se asuste, no son todo colas, la mayoría tienen pocas colas, cada autor va a firmar varios días, algunas veces es la suerte, puedes llegar y besar el santo o puede que tengas que esperar un ratito.
Bien, pues como última visita de la feria, tal y como comenté anteriormente, fue para Ana Iurgaiz y Pilar Cabero que compartían caseta. Desde luego fue un placer conocerlas en persona, son un encanto de mujeres. Anda que si a Pilar y a mi nos dan una silla y un café nos quedamos ahí hasta la noche, ¡madre mía lo que cascamos en un momento!. Y por si me lees, Pilar, prometo que cuando vuelva por Rentería, te invito a ese café ;) También fue un placer que Ana Iturgaiz me tuviese fichada y me reconociese, me llevé su nuevo libro Tu nombre al trasluz que después de haber leído Acordes de seda sé que es un acierto seguro. De Pilar Cabero me llevé Asedio al corazón, que he leído tan buenas críticas de esa trilogía que estoy segura de que no me va a defraudar.
Y esto es todo, hasta aqui lo que dio de sí este año la Feria del libro de Madrid para mí.
Debo añadir, que ese mismo día era la Noche en blanco en Alcalá de Henares y en la Librería de Javier había firmas de libros hasta bien tarde. También fui con mi marido e hijos a que Alejandro Palomas me dedicase su libro Una madre y nos hicimos una foto con él, en familia, pero...también ha desaparecido :(
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