Revista Libros
Francisco Ferrer Lerín.Poesía reunida (1959-2022).Edición de Aurelio Major.Tusquets. Barcelona, 2023.
Como “poeta, lexicógrafo, narrador, onirófago, propagador del arte casual y ornitólogo” define Aurelio Major a Francisco Ferrer Lerín (Barcelona,1942) en el epílogo a la edición de su Poesía reunida (1959-2022) que publica Tusquets.
La abre este poema, el que abría también su primer libro, De las condiciones humanas:
Que engaño al mundoque nadie sabe la verdad de mi existencia y de las altas glorias que albergo.
Que mintiendo y transformando lo que por mí pasa agoto la esperanza de los zaheridos por mi lengua nublo el son de sus vidasy la gruesa fruta resbala entre mis dedos aniquilándose.
Ya la rueda enorme camina sobresaltada sus radios disformes confundidosy ella representa toda elocuenciay disimulo de risas.
Ya la leña patente a cualquier ojocrepita indemne a la fuerza de vuestras hoces vendida a míy a todo lo que represento.
Tambiénes posible acabar con la cabeza aplastadao con el latido fresco del potro vibrando en derredory tambiénnotar en el estómago un tenue vacíoo una bala reluciente adherida a las capas más hondas.
Por lo tantoprefiero desnudar mi gigantesca valía en presencia de los pueblos recibiendo así el tributo magistralhonra y prez a los grandesy sus nemigas inocentes apuntalando mi huida.
Desde ese libro inicial, de 1964, hasta Grafo pez (2020), pasando por Cónsul, Fámulo, Hiela sangre o Libro de la confusión, se reúnen en este volumen los siete libros de poesía de Ferrer Lerín, a los que se suman cuatro textos inéditos.
En los anejos -Edad del insecto- se recogen textos escritos entre 1959 y 1989, laterales a los libros reunidos en esta edición que incorpora también algunos de los prólogos que los presentaron. Entre ellos, el de Gimferrer a Cónsul, donde destaca que “la poesía, ante todo, debe ser exploración y revelación.”
Poesía intuitiva, visionaria y provocadora que se instala en el territorio pantanoso de la postvanguardia, entre el experimentalismo y la intertextualidad, para construir desde la extrañeza una poética extrema y marginal, una escritura en libertad, heterodoxa y de condición radical, como se ha destacado en algún estudio sobre su obra. Como “un poeta del enigma, del desmán, del arcano, del rijo, del sindiós, del crimen y de la casquería” lo definió Félix de Azúa.
Con un largo periodo de silencio entre Cónsul (1987) y Fámulo (2009), la poesía de Ferrer Lerín va cambiando de tono de voz y emprende también a partir de ese libro un camino hacia la claridad. Poemas como este, del Libro de la confusión (2019) lo reflejan:
DEJAS ATRÁS
Dejas atrás la blusa de organdí con que excitabas a Infausto,la orquesta de charanga principal en los festejos del Día de los Ángeles,el revuelto de ajos tiernos que incomodaba a Gato Ceroy la macedonia de frutas tropicalesdedicada al recuento de las moscas de la carne.
También dejas atrás la lectura de Seferis,la hormigonera de juguete comprada en el mercadillo de Parque Ministerios,las bombillas fundidas del vestidor de los domingosy el ruido endiablado del cambio de marchas de nuestro primer descapotable.
Te quiero Conchita tal como fuiste en los primeros años,tal como fuiste en la época de esplendor que duró tan poco,tal como fuiste en el griterío de la sordera y la escasa claridad,tal como eres ahora blanca y sonriente en esta caja de pino.
Empujan los soldados corpulentos de uniforme verdoso,parecen tener prisa en este trámite vulgar,quizá teman que el calor y la humedad pudran la manoque cuelga fuera intentando despedirse del mundoo quizá agarrarse a la mía,también colgante.
O este intenso ‘Término’, que cerraba su último Grafo pez:
Nada hay al otro lado que no haya sido dicho.
En busca sólo de alimento ¿que mirar todavía?
Un viento amargo inunda la ciudad, las ciudades del sueño donde duerme la memoria del sueño.
Lenguas de fuego, dónde lo apenas entrevisto, lo casi no entredicho.
Y qué final.
Esta edición se propone -en palabras de Aurelio Major- “delinear una imagen posible, con todas las cautelas del caso, de un implícito texto y ritmo originales en la obra de Francisco Ferrer Lerín, habida cuenta de que se trata aquí de una poesía del riesgo, siempre inestable en el marco cambiante del verso, el poema en prosa, el caligrama, la cita, el guion, el cuento, el informe, el centón, el teatro; y de los propios restos biográficos, cuya carroña, conviene reiterarlo para circunscribir el equívoco y enterrarlo, es devorada, digerida y sobre todo tergiversada en sus poemas.”
Santos Domínguez