Ferritina baja

La ferritina sérica es una proteína que se encuentra en los glóbulos rojos de la sangre y se encarga de almacenar el hierro que se obtiene a través de la alimentación para que el organismo lo utilice cuando lo necesite. Un examen de ferritina en sangre permite conocer la cantidad de hierro concentrada es el fluido, por esta razón la ferritina baja se asocia con la deficiencia de hierro.

Los síntomas de la ferritina baja varían según la causa de dicha condición. Detectar a tiempo los niveles bajos de esta proteína en sangre es fundamental para tratar debidamente la afección y prevenir que la falta de hierro en el organismo comprometa de manera importante la salud. Para conocer más a fondo cuáles son las causas de la ferritina baja, síntomas y tratamiento te invitamos a seguir leyendo este artículo de eSalud.

Ferritina baja en sangre

Para diagnosticar niveles bajos de ferritina sérica en el organismo es necesario llevar a cabo una analítica. A partir de la muestra de sangre de la persona se pueden conocer los niveles de esta proteína en el flujo sanguíneo. Los valores normales de ferritina son:

• Niveles de ferritina en hombres: de 30 a 300ng/ml.
• Niveles de ferritina en mujeres: de 18 a 200ng/ml.
• Niveles de ferritina en recién nacidos: de 25 a 200ng/ml.
• Niveles de ferritina en niños entre 6 meses y 15 años de edad: de 7 a 150ng/ml.

Cualquier examen de ferritina sérica que arroje valores inferiores al mínimo mencionado anteriormente indica que la persona tiene bajos niveles de ferritina y hierro en el organismo. Ante este diagnóstico es posible que el médico ordene una serie de pruebas adicionales para poder encontrar el origen de esta deficiencia.

Causas de la ferritina baja

Anemia

La anemia es una condición que ocurre cuando la sangre no está transportando suficiente oxígeno a todo el cuerpo. La causa más común de anemia es tener deficiencia de hierro, y que este mineral es el responsable de producir hemoglobina, sustancia proteica responsable del color rojo de la sangre y de transportar el oxígeno desde los pulmones hasta demás partes del organismo. Existen varios tipos de anemia, pero los asociados a niveles bajo de ferritina son:

• Anemia ferropénica: es el tipo de anemia más común y ocurre cuando el cuerpo no tiene suficiente cantidad de hierro para producir glóbulos rojos sanos. Este tipo de anemia puede ocurrir porque el cuerpo no absorbe correctamente el hierro de los alimentos, porque la persona lleva una dieta baja en hierro o porque el cuerpo necesita mayores niveles de hierro de lo normal debido a embarazo o lactancia materna. La enfermedad celíaca, las hemorragias, la cirugía bariátrica, el consumo excesivo de antiácidos, el uso prolongado de aspirina y las menstruaciones frecuentes y abundantes pueden causar deficiencia de hierro y producir anemia ferropénica.
• La mala utilización del hierro por parte de los glóbulos blancos puede desencadenar anemia. En estos casos los niveles de hierro en sangre son normales, pero el cuerpo no utiliza a su favor esta sustancia.
• Si el organismo no trasporta adecuadamente el hierro que se obtiene a través de la alimentación hasta los glóbulos rojos se dificulta la producción de hemoglobina y se compromete la oxigenación debida del cuerpo humano.
• Diariamente el bazo elimina las células sanguíneas viejas, que suelen durar 120 días en el cuerpo, y estas son repuestas por células nuevas que se producen en la médula ósea. Una producción insuficiente de glóbulos rojos sanos por parte de la médula ósea puede causar anemia crónica.

Hipotiroidismo

El hipotiroidismo dificulta la absorción de hierro.

La tiroides es una de las glándulas endocrinas que secreta hormonas y está ubicada en el cuello, por encima de la clavícula. Las hormonas tiroideas controlan gran parte de nuestro organismo: la temperatura corporal, el ritmo de los latidos del corazón, la rapidez con que se pierde peso y otras funciones relacionadas con el metabolismo. Cuando la glándula tiroides de una persona no secreta suficiente hormona tiroidea se habla de hipotiroidismo.

El hipotiroidismo es una enfermedad que afecta más a las mujeres que a los hombres y aunque está asociado a otras condiciones de la tiroides también puede ser congénito. El hipotiroidismo dificulta la absorción de hierro ya que el organismo deja producir ácido clorhídrico. Además, esta afección causa aumento de peso, intolerancia al frío, estreñimiento, dolor articular, piel seca y palpitaciones lentas, entre otros síntomas. Una persona diagnosticada con hipotiroidismo deberá tomar hormona sintética a diario para corregir las consecuencias de esta condición.

Enfermedad renal

Cualquier afección que perjudique el funcionamiento óptimo de los riñones puede comprometer la producción de eritropoyetina por parte de estos órganos. La eritropoyetina es una sustancia que interviene en la formación de glóbulos rojos, razón por la cual muchas veces los niveles bajos de ferritina están vinculados con enfermedades renales. Las personas con enfermedad renal crónica suelen tomar suplementos de hierro.

Alimentación desequilibrada

En la era de las dietas milagrosas y la obsesión por el fitness son cada vez más las personas que se someten a regímenes alimenticios muy estrictos para bajar de peso. La mayoría del hierro que el organismo almacena se obtiene a través de la alimentación, cuando no nos alimentamos adecuadamente comprometemos de forma importantes nuestra nutrición, causando, por ejemplo, un déficit de hierro en sangre que puede derivar en anemia.

Para evitar la ferritina baja por una dieta extrema es importante no seguir las pautas alimenticias de revistas o artistas, si deseas adelgazar o quitarte un par de kilos lo ideal es hacerlo de la manera más saludable posible y de la mano de un especialista en nutrición. Prescindir del consumo de cualquier grupo alimenticio es perjudicial para la salud, lo ideal es aprender a comer de forma saludable sin pasar hambre.

Tratamientos médicos

Algunos tratamientos como la quimioterapia pueden causar niveles bajos de ferritina. Los químicos utilizados en el tratamiento contra el cáncer pueden matar los glóbulos rojos sanos antes de que culmine su vida útil, lo cual disminuye los niveles de hierro. En algunos casos más graves las personas con niveles muy bajos de ferritina necesitarán transfusiones sanguíneas.

Síntomas de la ferritina baja

Cuando los niveles de ferritina en sangre comienzan a descender es totalmente normal que no se presente ningún malestar. Sin embargo, con el paso del tiempo la sintomatología se hace presente y dependiendo del origen de la afección los síntomas pueden variar. Entre los más comunes encontramos:

• Fatiga: la fatiga es un síntoma de ferritina baja muy vinculado con la anemia. Se trata de un agotamiento extremo que impide que la persona realice todas sus actividades como de costumbre y sienta cansancio crónico con el mínimo esfuerzo.
• Pagofagia: no es un síntoma tan común, pero si está estrechamente relacionado con la falta de hierro y ferritina. Se trata de la necesidad incontrolable de comer y masticar hielo. Muchas personas pasan por desapercibida esta señal.
• Problemas repsiratorios: el hierro es indispensable para que la hemoglobina transporte correctamente el oxígeno a todos los tejidos. Niveles bajos de ferritina pueden afectar la oxigenación del organismo y causar afecciones respiratorias que deben ser tratadas a tiempo.
• Cabello y uñas débiles: la sangre es el fluido donde se encuentran todos los nutrientes, como el hierro, responsables de fortalecer el folículo piloso donde nace cada pelo. La deficiencia de hierro debilita el folículo y por ende causa caída del cabello. Asimismo, la ferritina baja produce debilidad en ñas uñas, haciendo que estas se partan con mucha facilidad.
• Piernas inquietas: los niveles bajos de ferritina pueden causar la necesidad de mover las piernas contantemente.
• Mareos. Cuando la ferritina baja es causada por anemia ferropénica es posible que la persona sienta mareos y debilidad.

Tratamiento de la ferritina baja

Algunos de los alimentos más ricos en hierro.

El tratamiento para la ferritina baja dependerá de su causa. Por lo general, las personas con anemia deberán comenzar a consumir alimentos ricos en hierro para revertir dicha condición. En casos más graves puede que sea necesario que la persona tome suplementos de hierro. El objetivo principal del tratamiento será normalizar los valores sanguíneos para evitar comprometer la oxigenación del organismo y prevenir todas las afecciones que esto puede causar. Cuando la ferritina baja es causada como efecto secundario de una enfermedad, como el hipotiroidismo, una vez que la persona empieza el tratamiento los valores deberían normalizarse.

Cuando el cuerpo no almacena o utiliza correctamente el hierro el consumo de suplementos es casi siempre el tratamiento más eficaz. Los suplementos pueden ser muy útiles para prevenir una anemia crónica y la dosis a tomar es a juicio del especialista médico.

Cómo subir la ferritina

La alimentación juega un papel fundamental para subir los niveles bajos de ferritina, razón por la cual es recomendable acudir a un nutricionista para que elabore un plan alimenticio que aporte gran cantidad de hierro al organismo. Es probable que en una dieta para la ferritina baja se recomiende lo siguiente:

• Disminuir el consumo de lácteos, ya que estos alimentos dificultan la absorción del hierro.
• Aumentar la ingesta de alimentos ricos en hierro como el berro, el perejil, el tomate de árbol, la remolacha y la zanahoria.
• Incluir en la dieta chocolate negro, ya que está elaborado con 100% cacao y el cacao es uno de los alimentos que más hierro aporta al cuerpo humano.
• El hígado de ternera es también una excelente proteína para corregir los niveles bajos de ferritina.