Eso es lo que promueve el Gobierno, pero no está claro que el mensaje haya gustado a todos los colectivos. De hecho, Italia está dividida por la nueva campaña del Ministerio de Salud a
favor del cuidado de la fertilidad de hombres y mujeres.
El Gobierno de Mateo Renzi intenta que baje la edad a la que las
italianas están teniendo su primer hijo, 30,7 años, la más alta de
Europa, seguida de España (30,6 años).
La ministra de salud ha ordenado cambiar algunos de los eslóganes de la campaña.
En uno de los carteles retirados, aparecía una mujer joven con una mano
posada en su vientre y un reloj de arena en la otra, junto al mensaje:
“Muévete: la belleza no tiene edad; la fertilidad, sí”.
La llamada a la acción de los hombres también ha resultado polémica.
En las versiones dirigidas a la población masculina, una de las
imágenes era una cáscara de plátano, junto al mensaje: “La fertilidad
masculina es mucho más vulnerable de lo que puedas pensar”.
En otro, podía verse a un hombre fumando, junto a la advertencia: “No
dejes que tu esperma se esfume”.
Italia es el país con la tasa de natalidad
más baja de la Unión Europea, con un niño nacido en 2015 por cada 1.000
residentes.
El problema es similar en todo el mundo desarrollado.
Algunas de las críticas a la campaña han estado mejor fundamentadas.
El principal problema con la salud de la fertilidad de mujeres y
hombres, en Italia y en Europa, es que los jóvenes no tienen empleo y la
familia natural no tiene futuro –para los Gobiernos, y para la cultura
predominante.
Eso no se arregla con campañas de publicidad.