Su emplazamiento en el extremo nororiental de Cataluña confiere a Figueres uno de los entornos más privilegiados de la geografía peninsular, entre la turística Costa Brava y el interior histórico, punto de paso obligado en el trayecto desde y hacia Francia.
Port Lligat, por su parte, es un precioso pueblo de pescadores a diez minutos de , dos lugares de referencia en la vida y obra del genial pintor Salvador Dalí. Figueres y Port Lligat, próximos destinos con historia.
La historia de Figueres
Lugar de paso en la Vía Augusta romana, Figueres obtuvo sus propios fueros en 1267 de manos del rey Jaime I.En su historia, en la que se han sucedido las conquistas y las invasiones, destaca un episodio protagonizado por Huc V, conde de Ampurias, que saqueó la ciudad durante una rebelión nobiliaria contra el monarca.
Durante el siglo XIX adquirió notoriedad y pujanza, le fue concedido el título de ciudad y se convirtió en un centro de ideas republicanas y federalistas. Aparte de Dalí, es natural de Figueras una persona como Narciso Monturiol, inventor de una nave submarina.
Fernando VI mandó construir el castillo de Sant Ferran (1753-1766), una impresionante fortificación que acogería, dos siglos después, la última sesión de las Cortes republicanas en territorio español al final de la Guerra Civil. Este impresionante castillo, de 32 hectáreas de extensión y 3.120 metros de perímetro, es una de las mayores fortalezas con baluartes de Europa.
La Torre Galatea, antigua casa Gorgot (siglo XVII), otro de los vestigios del patrimonio arquitectónico militar de Figueres, fue reconvertida en el edificio actual por Dalí, en homenaje a su esposa Gala.
La capital del Alt Empordà también cobija otros enclaves, como el Museu de Joguets, que alberga una interesante muestra de juguetes de todas las épocas. Asimismo, resulta recomendable un paseo por su populosa Rambla, flanqueada por grandes plátanos y edificios del siglo XIX, y por la plaza Nova del Gea, cubierta por una estructura de hierro.
El Teatre Museu Dalí
El Teatre Museu Dalí, erigido en el solar del antiguo teatro municipal, destruido por un incendio al final de la Guerra Civil, fue inaugurado en 1974. El edificio actual es de estilo neoclásico. El artista lo transformó en uno de los espacios artísticos más ingeniosos existentes, y en él es posible contemplar la más amplia e ilustrativa colección de la dilatada obra de Dalí.
En 1930, el pintor catalán compró una pequeña cabaña de pescadores en Port Lligat, atraído por las vistas a la bahía y los montes de olivos, así como por su intensa luz. Adquirió con el paso del tiempo otras casas aledañas donde trabajó hasta la muerte de su musa Gala en 1982.
Un paseo por Port Lligat
El recorrido por la casa museo comienza en el recibidor, donde un oso polar disecado, con barretina, saluda a los invitados. Otros objetos curiosos que se encuentran son unos huevos gigantes, símbolo de fertilidad, en la parte superior del museo, una piscina en forma de pene o un porche con forma de radio.
Por la casa de Port Lligat pasaron figuras de la talla de Federico García Loca, Paul Éluard, René Magritte, Marcel Duchamp y Luis Buñuel. En multitud de obras del genial artista se pueden apreciar las formas agrestes y duras de unos parajes que fueron calificados por el maestro como los más bellos del planeta.
Desde el mismo Port Lligat el viajero puede adentrarse en la zona más oriental de la península del cabo de Creus. Quedará asombrado por un paisaje sobrecogido, de una belleza salvaje y abrupta. Por una pista se puede llegar hasta el mismo cabo de Creus, donde se erige un faro. Se puede decir que se está en el fin del mundo.
Desde Figueres se puede acceder, en el golfo de Roses, hasta , un apasionante yacimiento arqueológico a cielo abierto. Pero este lugar merece, sin duda, otro capítulo. También se pueden visitar la Garrotxa, o Castellfollit de la Roca.
Soy periodista y experto universitario en protocolo. He trabajado en diferentes medios de comunicación como 20 minutos, Las Provincias o Diario 16. Ahora ejerzo labores de community manager, colaboro en blogs y publicaciones digitales. Autor del libro 'Eso no estaba en mi libro de Historia de Roma'.