Hoy mismo, con un desfile en la Real Fábrica de Tapices, empieza la 78 edición de FIMI que, por primera vez, se va a celebrar en Madrid.
Creo que traer la feria a Madrid ha sido un acierto pues, no nos engañemos, menos por barco, Madrid es mucho más accesible que otras muchas ciudades españolas. Estoy convencida, insisto, en que ha sido una buena idea y de que este fin de semana FIMI va a ser un éxito.
Ahora bien, a mí me han hundido en el miseria. ¿Vosotras sabéis lo que es saber que, dos veces al año, vas a coger tu maletita y te vas a ir todo el fin de semana tú solita a un hotel, a pasear con calma entre stands llenos de ropa, a ver a tus conocidos, a cenar con tus amigas… sabiendo que al terminar no vas a tener que ir a hacer la compra, los deberes o preparar la cena?
Pues sí, amigas mías, yo soy una victima indirecta o un daño colateral -llamadlo como queráis- del traslado de FIMI a Madrid. ¡Y encima me entero de que estos días George Clooney está en Valencia!
En fin, ¡todo sea por la moda infantil!
No sé si habrá sido para compensarme por el disgusto, la organización de FIMI me ha invitado a dar una charla sobre los blogs como estrategia de marketing. Esto será el sábado y hasta que ese momento llegue, éstas son solo algunas de las cosas que voy a hacer:
La foto del Mindu la pongo para presumir, por supuesto, y porque estoy deseando ver en el stand de A Gatas las fotos definitivas de la colección de invierno para comprobar si, como sueño todas las noches, este hijo mío me va a sacar de pobre o no.
¡FELIZ FIMI A TODOS!
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