Las semanas previas al verano son semanas en las que las series más destacadas de la televisión anglosajona concluyen su recorrido. Este es un nuevo repaso a algunos de los finales de temporada más interesantes del momento. Breaking bad (3ª temporada). Parece difícil de creer pero esta serie, que no tiene ese número de seguidores que tienen otras, ha demostrado que es posible hacer cada temporada mejor que la anterior. Breaking bad es una historia llena de giros inesperados que es capaz de sorprendernos continuamente. A su favor está un dibujo de personajes que su creador, Vince Gilligan, ha sabido diseñar con maestría, sin arquetipos ni obviedades, lo que le ha permitido ir descubriendo el lado oscuro de cada uno de ellos. Sin embargo, por decir algo en contra de esta tercera temporada, el perfil de Pinkman, ahora más serio, sufridor, depresivo, me ha resultado más soso que en las anteriores temporadas. Pero, como siempre, los dos últimos episodios han sido demoledores, y AMC ya ha confirmado su continuidad. Bienvenida sea.
United States of Tara (2ª temporada). La serie producida por Steven Spielberg, escrita por Diablo Cody y magistralmente interpretada por Toni Collette, ha resultado decepcionante en su segunda entrega. Si la primera temporada era un cachondeo bien hilvanado, sorprendente y original, ésta ha perdido fuelle desde el principio, con cierta tendencia a una seriedad que no necesita. Y con subtramas (especialmente la de los dos hijos de la pareja protagonista) aburridas y algo ingenuas. Aunque Showtime ya ha firmado una tercera temporada, mucho tienen que cambiar las cosas para que vuelva a tener la chispa que tenía al principio. También es verdad que el impacto de una protagonista multifacial llega a agotarse, por mucho que se incorporen nuevos personalidades. Al menos han merecido la pena dos episodios, Torando! y From this day forward (el último). Divertidos, ingeniosos y hasta adecuadamente sentimentales. Treme (1ª temporada). La nueva serie de David Simon llega a su punto final tras haber hecho un repaso magistral a la ciudad de Nueva Orleans y su música. Hay que reconocer que es difícil entrar en la historia, aunque tiene ese toque de realidad y personalidad que siempre caracterizan a su creador. Pero una vez conoces a los personajes (interpretados por algunos de los actores de la mítica The wire), es difícil no empatizar con ellos y tener ganas de seguir acompañándoles en su tediosa pero al mismo fascinante vida mundana. Recomendamos especialmente seguir esta serie de HBO mientras se lee y escucha el podcast de la Cadena Ser en el que Antonio Martínez nos introduce en la música de cada episodio y nos ayuda a entender mejor la magia de Nueva Orleans. Su enlace se encuentra en nuestra lista de blogs recomendados. The Tudors (4ª temporada). Final definitivo para esta inteligente traslación a la pantalla de la vida de Enrique VIII que presenta Showtime. Buenas actores, buena ambientación, buena música y un guión que desgrana con inteligencia los momentos más destacados de una trayectoria vital unida a la historia de Inglaterra. El trabajo del creador y guionista Michael Hirst durante estas cuatro temporadas ha sido espléndido, mezclando con sabiduría la corte y sus conspiraciones con una generosa dosis de desnudos femeninos y masculinos. Y ha sabido mostrar la complicada personalidad de un rey altivo, cruel y manipulador pero al mismo tiempo astuto y seductor. Posiblemente The Tudors sea una de las series históricas más interesantes que se han hecho en la televisión, y eso demuestra que hay vida más allá de HBO y BBC.