Fines de semana en pareja (Mi vida en Japón 22ª parte)

A pesar de que había cambiado Shiki por Matsudo para poder verme mas a menudo con Yuka no fue así, ya que Yuka andaba muy ocupada durante la semana, combinaba sus estudios en la universidad con un trabajo por horas y dando unas pocas clases en una academia de repaso. Con lo que solo nos quedaban los fines de semana los cuales los aprovechábamos para estar juntos.

Si bien entre semana ya fuera con Manuel , Andre o solo, aprovechaba para ver cosas turísticas del centro de Tokyo casi siempre cosas dentro de la cultura Otaku o que a los extranjeros nos parecen curiosas. Durante el fin de semana con Yuka hacíamos un poco de turismo mas “normal” o serio y visitamos lugares como El museo Ghibli en Mitaka, el área comercial de Suidobashi, el templo de Yasukuni o una exposición de Salvador Dalí que vino al parque de Ueno entre otros lugares.

En el museo Ghibli

También aprovechamos algún fin de semana para pasar lo en casa de mis suegros para que nos conociéramos un poco mas ya que nuestra relación había ido avanzando y sus padres vieron que la cosa iba en serio entre nosotros dos con lo que veían con buenos ojos que fuera a visitarlos y pasar fines de semana con ellos ya que en el futuro seria difícil.

Me gustaba estar en casa de los padres de Yuka, era muy tranquilo y podíamos dedicarnos a descansar de la semana,pero también había tiempo para que visitar lugares que no tenia previstos como la escuela donde Yuka estudio, la ciudad de Yachimata o el templo de Naritasan en Narita (Chiba). Me llevaba muy bien con los padres de Yuka a pesar de que el idioma era un problema aunque con mi nivel de japonés no podía entablar mucha conversación podía hacerme entender y entender lo que me decían, y para lo complicado allí estaba Yuka.

Entrada al templo de Naritasan

Me encontraba a mitad de mi estancia y el 14 de Febrero recibí este regalo por San Valentín de parte de Yuka que me hizo muchísima ilusión.

Como dicta la tradición japonesa debería de devolverle el regalo el White day (14 de Marzo) que quedaría cerca de mi vuelta a casa. También sabia que aunque lo habíamos hablado tendríamos que pensar un plan para nuestro futuro juntos una vez yo volviera a España.

Continuara