O fin de semana de rodríguez
Este fin de semana se ha celebrado, de viernes a domingo, la 20ª edición de la Fira de novembre en la ciudad, así que hemos estado muy entretenidas, y hemos acabado agotadas, por supuesto.
La Fira de Novembre es una feria multisectorial que tiene lugar en mi ciudad en el mes de noviembre, como su propio nombre indica. Es uno de los eventos de esta categoría más importantes de Catalunya, tanto por la superficie como por número de expositores. Este año han sido 65.000 metros cuadrados de superficie, con más de 260 expositores, e innumerables actividades, repartidos por diferentes emplazamientos de la ciudad.
Otros años se condensaba toda la actividad en el centro; pero este año, por fin, se han decidido a aprovechar otros espacios de la ciudad que, por lo general, no tienen mucha afluencia de gente, a pesar de ser zonas amplias. Así que se han ubicado los stands y las actividades a lo largo de toda la rambla, y en uno de los grandes espacios abiertos (un parque y una plaza) de reciente construcción en el barrio marítimo.
Además de todos los stands, de sectores muy variados (automoción, alimentación, alojamiento, restauración, muebles, menaje ) se organizan infinidad de actividades: deportes, talleres infantiles. talleres de encaje de bolillos, muestra de dibujos infantiles, encuentro de coleccionistas de placas de cava, el mercado de artesanos o la muestra de pintura, entre otros. Así que, como puedes ver, el enfoque no es de una feria comercial y poco más, sino que se programan infinidad de actividades, para imprimirle carácter lúdico al evento.
Estando como estábamos las tres solitas (el cari se fue a pasar el finde con tres amigos, a hacer un poco de BTT y esas cosas; si no soy yo la única gambitera: él también se ha animado), el sábado por la mañana nos levantamos tempranísimo. A las 7:30 estábamos en pie; las Chocolatinas estuvieron viendo la tele y desayunando y yo estuve recogiendo un poco el salón y la cocina. Ducha, vestirse… y a la calle, que es lo que nos gusta más.
Pasamos por la plaza de la Vila, donde se concentró la actividad de la Asociación Viu Comerç, que engloba a varios comercios de la ciudad, y que el viernes por la noche celebraron el primer Shopping Night de la ciudad; la propuesta consistía en disfrutar de una noche de compras con los comercios del centro de la ciudad abiertos hasta medianoche, tomar una copa de cava y disfrutar de música en vivo delante de algunos comercios, y presenciar un desfile en la plaza de la Vila.
De allí nos dirigimos a la rambla Principal, pasamos por el tramo dedicado a la automoción, y después por todo el tramo de alimentación, donde había stands de todo, pero sobre todo, queserías, productos ibéricos, panaderías tradicionales, puestos de conservas… todo comercios tradicionales y artesanales, con muchísima comida y toda con una pinta excelente.
Seguimos de camino a la Plaça de la Mediterrània, en el barrio marítimo, donde sabíamos que se organizaban diferentes actividades infantiles. Y en el Parc de Baix a Mar había un taller de animales de granja para que los viesen los niños, y una zona de hípica y carruajes de caballos, con ponies, percherones y caballos para que los niños pudiesen subir. Y las Chocolatinas subieron, evidentemente. También había allí las parades del mercado de artesanos, un mercado juvenil, y las actividades deportivas, organizadas por el Ciclo Formativo de Grado Superior de uno de los institutos de la ciudad. Además, cómo no, había atracciones para los niños: autos de choque, carroussel y algunas cositas más.
Estuvimos por allí toda la mañana; después de encontrarnos con mi Sista G. y su peque J., nos dirigimos de nuevo al centro de la ciudad, donde nos encontramos con A. y sus dos niñas (los maridos de G. y A. también estaban de finde con el cari). Comimos en un Frankfurt; después, subimos una horita a casa de G. a descansar un poquito (y beber un poquito de lambrusco, charlando y viendo tonterías en Youtube.
Por la tarde, volvimos al Parc de Baix a Mar, y allí nos encontramos con la “cuarta en discordia”, I. con dos sus peques, que también estaba de rodríguez, porque su marido también estaba con los otros tres deportistas. Y estuvimos paseando las cuatro con los siete niños; las Chocolatinas y la hija mayor de A. volvieron a subir a los caballos, y luego estuvimos un rato en las atracciones.
Algo más tarde de las 19:30 horas emprendimos, tranquilamente la vuelta a casa, por una zona menos concurrida que la rambla. Arrastrando ya los pies de puro cansancio; y los pequeños, ¡ya no quieras saber ni cómo estaban, claro!
Llegamos a casa, pedimos kebab a domicilio, cenamos y acosté a las Chocolatinas; cuando ya dormían, me apoltroné en el sofá, con una botellita de lambrusco tinto, y disfruté de ella, viendo una película… hasta que Chocolatina Menor me reclamó. Puse la segunda película de la noche en pausa, con la intención de volver a salir después de atender a la niña, pero el sueño pudo conmigo. Y cuando abrí los ojos eran ya las 5:45 de la mañana del domingo, así que me levante, apagué la tele y me volví a la cama un par de horitas más, hasta que las niñas despertaron.
Fue agotador, pero estuvo muy bien.
Webs que hablan de la Fira:
- Sitio oficial (catalán).
- Festa Catalunya (catalán).
- Galgos 112 (castellano).