Imagino que la mayoría habéis leído o escuchado la noticia del señor al que le han caído dos años y medio de cárcel por espiar el móvil de su pareja en busca de pruebas de infidelidad. Sin entrar a valorar este caso en concreto yo me pregunto cómo este hombre ha podido estar tan mal asesorado. Una cosa es que te valgas de técnicas poco licitas para cerciorarte de que te están poniendo los cuernos y otra es que lo presentes como prueba en un juicio de divorcio. No digo que no sea tentador, pero…
En cualquier caso, espiar el móvil de tu pareja, además de no ser legal, está feo. Quien dice móvil, dice correo o redes sociales o lo que sea. Incluso sin nada que ocultar es un ataque a la intimidad brutal. Otra cosa es que te de igual y te dejes el correo o el Facebook abierto en el PC de casa y el que venga se lo encuentre abierto
Me alucina pero no me sorprende casi nada como la gente está dispuesta a casi cualquier cosa por cotillear en los WhatsApps, redes sociales y correo electrónico de sus parejas. No sé si conocéis al hacker Chema Alonso; si no lo conocéis os recomiendo buscar alguna de sus charlas en Youtube, es bastante interesante (por ejemplo, esta) . Este reputado
Dicho todo lo anterior y como casi siempre digo hay que verse en situación. ¿Te han espiado digitalmente alguna vez? ¿Tú lo has hecho? ¿Lo harías? La respuesta no es tan fácil como parece a priori, al menos una respuesta meditada y sincera.