El New York Times lanzó el pasado 1 de Junio un artículo según el cual Obama habría ordenado la ola de cyberataques contra Irán, ya iniciada en la administración Bush. El pasado día 20 era el Washington Post el que confirma que el gusano Flame también es obra de Estados Unidos. El país junto a Israel desarrollaron el malware para atacar el programa nuclear iraní.
Flame fue descubierto a finales del mes de mayo por la firma de seguridad Kaspersky. Se trataba según la compañía del “software malicioso de vigilancia más complejo hasta la fecha”. Un programa que recopilaba datos privados de otros países y que habría estado operando desde agosto del 2010. Desde Kaspersky explicaban así:
Una vez que el sistema está infectado, Flame comienza un complejo conjunto de operaciones, incluyendo la sustracción del tráfico de la red, realiza capturas de pantalla, graba conversaciones de audio, intercepta el teclado y así sucesivamente.Se sabía que el virus habría afectado a Irán, Sudán, Siria, Líbano, Arabia Saudita y Egipto, por lo que faltaba por saber quién o quienes habrían diseñado el malware.
Pues bien, según contaba el Washington Post, Flame es el esfuerzo entre Estados Unidos e Israel con el fin de atacar el programa nuclear de Irán. Una confirmación que les ha llegado a través de varios funcionarios anónimos que han trabajado en el proyecto.
Un malware que viene a ser la continuación de Stuxnet (2010) en el que estarían involucrados varias agencias incluyendo la NSA, CIA o los militares israelíes. Su desarrollo habría comenzado cinco años atrás en el marco de una operación clasificada bajo el nombre en código de “Olympic Games”.
(El cyberataque a Iran). Desde el comienzo se había especulado sobre la conexión entre Estados Unidos e Israel. La razón es que los investigadores habían encontrado relación en el código de Flame con Stuxnet. Pistas que sugerían que Flame había sido desarrollado por los mismos autores que Stuxnet.
En este caso aún se desconoce el alcance que ha podido llegar a tener Flame
Fuente: Alt1040