Mi valoración personal:
¿Cómo convertir una habitación de ático en un paraíso, como si no fuera una cárcel?
Es una difícil tarea pero sin embargo los cuatro niños lo consiguen en apariencia, y convierten su carcelario habitáculo en su pequeño mundo donde unas flores inocentes e ingenuas se marchitan, impidiendo que florezcan sanas y hermosas. La obra de V.C. Andrews cuenta con el mérito de emocionar a millones de lectores de todo el mundo con la sobrecogedora historia de los hermanos Dollanganger. Pronto se convirtió en un best-seller y en el fiel reflejo de lo que es capaz el ser humano cuando se antepone la avaricia y la ambición al amor y el cariño, todo llevado hasta las últimas consecuencias y a niveles realmente catastróficos. Flores en el Ático también muestra cómo la confianza puede ser rota y quebrantaba en poco tiempo, más si reace en la persona que más queremos, y cómo el afán por el dinero nubla la mente sin razonar las consecuencias de los actos cometidos.
No es el amor lo que hace girar el mundo, sino el dinero.
(Corrine)Todo ese dinero no vale la pena los días de vida que hemos perdido.
(Cathy) No querré ser otra cosa ni desearé ninguna otra cosa que se pueda comprar con dinero. (Chris)
Esta primera novela de una exitosa saga literaria es la historia de una mujer joven y bella, amada esposa y envidiada madre, perfecta y delicada a la vez; una mujer que de la noche a la mañana se convierte en un fantasma sin alma alguna, amor o resentimiento, un ser cegado por la ambición, el deseo, las riquezas y las falsas promesas de un perdón paternal que jamás llegó. Es la historia de una mujer herida cuando los seres a los que creía proteger la juzgan por sus acciones. Pero sobre todo Flores en el Ático es la historia de Corrine vista a través de los ojos de sus cuatro hijos, los muñecos de Dresde; cuatro almas en pena encerradas en vida, inocentes y jóvenes, inteligentes y creativas, que se verán forzadas a madurar prematuramente si quieren ver florecer la vida más allá de los muros que los encierran.
Es imposible sentir otra cosa que repugnancia por lo que no es sano.
(Olivia Foxworth, la abuela) Esta historia, aunque muy cruel, sorprende y mucho. Frente a la despiadada abuela de los retoños, una mujer con alma de acero y sumamente religiosa; una madre ansiosa de heredar y colmar su vida de lujos (sin hijos de por medio) y un abuelo rencoroso al perdón, ahí están los cuatro hermanos, siempre unidos, formando casi una familia entre ellos y anhelando lo que dejaron atrás entre juegos y conversaciones en torno a la vida, el amor y el perdón. Con sus sueños truncados y las promesas rotas, caen en las redes del pecado, lo más impío, sucio, ruín y pecaminoso a los ojos de Dios: el incesto. Y es que ¿qué pueden hacer dos niños entrados en plena adolescencia, encerrados y privados del mundo exterior, con sus cuerpos desarrollándose y ávidos de saber del sexo opuesto? El amor, cariño, admiración y respeto entre Chris y Cathy traspasarán los límites estrictamente fraternales hasta el punto que este hecho les marcará por siempre.
Insidiosos pensamientos penetraban en mi mente [...] ¡Hijos del demonio!
(Cathy)
Visto así a grosso modo Flores en el Ático muestra tres pecados capitales: el asesinato, la ambición y el mencionado incesto, en este caso entre tío-sobrina y mayormente entre hermano-hermana. V.C. Andrews sabe muy bien lo que quiere y busca el lector en novelas de este tipo y aunque pueda parecer de terror gótico con tintes de melodrama, el libro amplía otros campos como el misterio, la intriga y la emoción casi hasta la última página. El primer libro de la saga Dollanganger, narrada en primera persona por Cathy y con sorprendente final, busca que el lector se compadezca de los protagonistas al igual que solidarizarse con ellos, de tal modo que ambas partes descubran los hechos narrados y sufran al unísono. También la novela roza el morbo con lo vivido entre los hermanos mayores, pues son varias las ocasiones en que dejan llevar sus pasiones prohibidas a solas en el ambiente lúgubre del ático, a los ojos de Dios y convirtiéndose en engendros del demonio tal y como les predijo su fría y estricta abuela.
No hay más odio que el que surge del amor traicionado.
(Cathy)
Con todo esto y más que pudiera decirse en torno a Flores en el Ático, la novela es uno de esos libros que consigue provocar muchos sentimientos en el lector, atrapándole desde la primera página y generándole un interés casi obsesivo por la historia. El estilo de la autora crea escuela, es ágil y con tacto, haciendo de esta primera parte todo un éxito de público y crítica, aunque en este último plano recibiera algunas muy polémicas por los temas tratados.
Título original: Flowers in the atticPáginas: 360Editorial: Plaza & Janés Editores (e-book) Puntuación: 10/10Bibliofiliómetro:
Filóloga Bibliófila