Como radiografías de la naturaleza teñidas en azul, la obra de Anna Atkins se dibuja en tonos cyan pero tiene su origen en los espacios verdes y llenos de plantas. Era botánica y fotógrafa, y fue la primera persona en publicar un libro ilustrado exclusivamente con imágenes fotográficas, del que se hicieron únicamente 12 copias. Utilizaba la técnica de la cianotipia, inventada por un amigo de la familia, como herramienta de estudio para agilizar el proceso de reflejar fielmente las características morfológicas de plantas, hojas, helechos, flores o algas.Su obra tiene la sutileza del artista que lo es sin querer, las delicadas hojas y ramillas parecen mecerse en un mundo misterioso y oceánico de tonalidades azules.