Con el fin de evitar que los problemas cardiovasculares de los conductores de sus coches puedan provocar algún tipo de accidente, Ford ha diseñado un asiento para sus coches con la capacidad de monitorizar el ritmo cardíaco del conductor.
Evidentemente, el sistema encargado de la monitorización estará completamente integrado con los sistemas del coche, de forma que, si detecta alguna anomalía en la actividad cardíaca del conductor, puede detener el coche y mandar un aviso a los servicios de emergencias con la dirección exacta en la que se encuentra.
Para realizar el proceso de monitorización, el asiento ideado por Ford incorpora seis sensores que detectan la actividad cardíaca a través de la ropa del conductor durante el 98% del tiempo de conducción.
Vía: Xataka