Las manifestaciones del 1º de mayo, hace años eran bastante importantes, esta última celebración tengo la impresión de que perdieron el fuelle de antaño, ya no hay esa alegría, esa fiesta que contagiaba al ciudadano.
Hace tiempo creo (esa es mi percepción) que los sindicatos no están en la 'onda', están acomodados en la 'mallas' de las instituciones como si pertenecieran a ellas por oposición.
De verdad sería muy importante despertar a los sindicatos y que fueran de nuevo parte de la lucha por los derechos de los trabajadores, ante la fiereza declarada por este capitalismo atroz y demencial que han orquestado muy bien desde la troika.
Esta troika liderada por Merkel, nos ha traído crisis y más crisis en donde nos han dejado desnudos ante la vida; nos han robado con los recortes salvajes en los servicios públicos, nos han llevado a poner en nuestras espaldas una deuda que no la hemos creado nosotros los ciudadanos, sino esa madeja representada por esa troika.
Ahora no tenemos respuesta para los jóvenes, pues estamos en un obsceno paro juvenil que no tiene trazas de solución.
La Ley de Dependencia, ya de facto no existe.
La Sanidad Pública nos la han hurtado con la fórmula 'magistral' de la sanidad privada.
La ley de Educación, ya no es ley ni es nada, es una ley fabricada para el capitalismo puro y duro.
Desigualdad representada por el abismo cada día mayor entre los pocos ricos y la inmensa mayoría de los pobres, que ya no pueden resistir tamaña barbaridad.
Por eso y alguna cosas más, los sindicatos deben reformarse y actuar como es debido con fórmulas para esta nuevas formas de vida.
Tenemos que advertirles que salgan de su cascarón cómodo; tiene que aplicar otras formas de lucha acorde con la nueva etapa que esta capitalismo salvaje nos ha situado.
Necesitamos actuación de nuevas fórmulas.