Una de las entradas a la fortificación abaluartada de la ciudad, construida a finales del siglo XVII frente al desaparecido Fuerte de Pardaleras (actual MEIAC). En la fachada exterior se puede ver el escudo de la Casa Real de los Austrias y el del Conde de Montijo (benefactor).
BALUARTE DE SAN ROQUE
Construido en el siglo XVII cubría el Fuerte de Pardaleras y la Puerta del Pilar, posee una galería de fusileros, fue uno de los primeros espacios de uso no militar albrergando la Plaza de Toros vieja desde 1818, derribada y rehubicada, ocupando ahora su lugar el Palacio de Congresos.
BALUARTE DE SANTA MARÍA o DE LA LAGUNA
Construido en el siglo XVII y posteriormente reforzado en 1772. En este baluarte era posible anegar todos sus fosos con aguas del Arroyo Rivillas convirtiéndo el baluarte en una isla amurallada. En este lugar calleron miles de soldados ingleses en la toma de la ciudad en 1812 que se encuentran enterrados allí. Se puede leer la fecha del ataque en uno de sus lienzos realizada con balas de cañón.
BALUARTE DE LA TRINIDAD
Construido en el siglo XVII y su nombre proviene del Convento de los Trinitarios que se encontraba en el interior del baluarte desde el siglo XIII, fue destruido en los sitios de la ciudad en 1811 y 1812. Para la construcción del baluarte se utilizaron materiales del convento así como se tuvo que derribar la Cerca Vieja y la Puerta de la Trinidad, recolocándola.
BALUARTE DE SAN PEDRO
Situado en la zona más expuesta al fuego enemigo, fue construido en el siglo XVII y objeto de reformas en el siglo XVIII tras el asedio de octubre de 1705 durante la Guerra de Sucesión Española. En uno de sus lienzos encontramos una de las más desconcidas puertas del recinto amurallado, la Puerta de Mérida, situada en la zona oriental, en su cara externa destaca el escudo del Conde de Montijo y el de la Casa Real de los Austrias.
Sin duda un interesante paseo por Badajoz, descubriendo un momento de la historia de España en el cual la ciudad de Badajoz fue un lugar de gran importancia, pasear es descubrir la historia de esta ciudad, en cada rincón. Tan solo decir que el rico patrimonio de esta ciudad necesita ser cuidado y conservado, cosa que en esta caso se cumple en parte de la misma, pues hay otros lugares que están muy dejados, sucios, llenos de escombros y a medio restaurar, otros restaurados que para un inexperto como yo resulta chocante el cemento contrastando con los materiales originales. Recientement estuvimos en el Forte de Graça en Elvas donde se ha rehalizado una restauración ejemplar.