Además de los de Marte y de la Luna, existen registros fotográficos de las superficies de otros mundos. De hecho, los primeros viajes interplanetarios fueron los del programa soviético Venera a Venus, así como lo fueron las primeras fotos desde la superficie de otro planeta. Los ingenieros soviéticos fueron pioneros en el uso de cámaras en naves espaciales
La primera nave en posarse en otro mundo fue la Venera 7, el 15 de diciembre de 1970. Logró transmitir datos durante unos 20 minutos con enorme dificultad, pero no llevaba cámaras. Le siguió la Venera 8 el 22 de julio de 1972, aún sin cámaras pero sí con fotómetros. Finalmente, la Venera 9 aterrizó y transmitió imágenes el 22 de octubre de 1975, seguida por la Venera 10 tres días después y a 2.200 km de la anterior:
Según parece, el interés primario de la misión era "mirar al suelo" lo más cerca posible. Sin embargo, también pudo verse algo del cielo:
Hubo más misiones Venera: las mejores imágenes las sacaron las últimas que lo hicieron, como la Venera 14, el 4 de noviembre de 1981, dándoles tiempo incluso a realizar un barrido parcial en color antes de que el insoportable calor y la presión de la superficie venusiana las destruyera:
Venera 14, cámara 1
Venera 14, cámara 2
Otras experiencias, aunque relacionadas con lunas y no planetas, fueron -a no asombrarse- la sonda también soviética Luna 9, el primer objeto construido por el hombre en posarse suavemente en otro cuerpo celeste, nuestra Luna, en 1966:
Panorámica tomada por Luna 9 en febrero de 1966
Y en la luna Titán de Saturno se posó el módulo de descenso europeo Huygens de la sonda Cassini-Huygens el 14 de enero de 2005. Es lo más lejos que ha aterrizado una máquina hecha por manos humanas. Transmitió datos durante unos 90 minutos, incluyendo imágenes:
Fotografía tomada durante el descenso, a 2 km de altitud.
De otros planetas con superficie, existen fotos de Mercurio -sondas Mariner 10 y MESSENGER- que se acercaron pero no descendieron. Se han tomado también fotos y vídeos de otros satélites de Saturno, y de Júpiter, Urano y Neptuno, pero esos gigantes gaseosos no tendrían una superficie sólida, de tal modo que lo que se retrató fue su atmósfera superior.