Hoy os dejo un fragmento del tercer libro escrito por David Safier Yo, mi, me.. contigo. ¿Quién dijo que no hay tercero malo? Porque en este caso tiene razón. Si me reí con Maldito Karma y con Jesús me quiere, con este no podía ser menos. No me podía esperar el argumento de este libro viendo que el primero hacía una crítica sobre el budismo y el segundo sobre el cristianismo, pese a todo aquí tenemos un argumento divertido dispuesto a sacarnos una sonrisa. Si queréis pasar un buen rato lo tenéis asegurado con Safier.
El hombre, maldiciendo, intentó arrancar la espada de la tabla; la había hincado con tanta fuerza que
tenía dificultades para recuperarla. Me levanté de un salto y vi que me encontraba en una especie de escenario que se alzaba en medio de una gran sala, también construida en madera. Así pues, aquello no era un barco pirata. Algo era algo.
Lo que había alrededor y en lo alto, ¿eran palcos?
Tanto daba. Bajé la vista para mirarme: llevaba botas negras y también medias. ¿Por qué estaban tan abombadas en la zona de la entrepierna?
«No pienses en ello», me dije.
Observé cómo el hombre que maldecía estaba sacando la espada del suelo y murmuraba algo así
como «Voy a castrarte».
¿Castrarme? ¿Tenía eso algo que ver con las medias abombadas?
«¡No pienses en ello!», me ordené.
Yo, mi, me... contigoDavid SafierTraducción: Lidia Álvarez