Los análisis del laboratorio GlaxoSmithKline en su manual de la vacuna Infanrix IPV+HIB, entregados por vía judicial (junto a las copias de seguridad para España de esta vacuna) constatan el fraude a la salud pública en el volumen de aluminio en esta vacuna.
Como he contado en este blog, la vacuna Infanrix IPV+Hib es sospechosa de haber provocado la encefalopatía mortal de algunos de los bebés de la Asociación de Afectados por Vacunas (AxV). Por ello, los padres de esta asociación vienen realizando, fuera de España, análisis en laboratorios independientes para conocer el volumen real del contenido de los metales pesados de estas vacunas, obteniendo resultados que avalan la sospecha sobre el exceso de aluminio -compuesto potencialmente tóxico- que realmente contienen estas vacunas.
Insistimos de nuevo en esta sospecha, pues recientemente hemos tenido noticia de que los análisis sobre el contenido de aluminio de esta vacuna, REALIZADOS POR LOS PROPIOS TÉCNICOS DEL LABORATORIO GLAXOSMITHKLINE, cuyos resultados se encuentran en su manual de producción, al momento de la fabricación y envasado de la vacuna, el 13/09/2011, recogen que el contenido de aluminio de esta vacuna es de 1.35 mg por dosis (0.5 ml) cuando la ficha técnica y prospecto de esta vacuna recogen que contiene 0.5 mg por dosis (0.5 ml).
El manual de producción de la vacuna Infanrix DTPa IPV+Hib que contiene dicho análisis fue aportado judicialmente por Glaxo, junto a la copia de seguridad para toda España de esta vacuna, que llegó directamente desde la sede del laboratorio en Bélgica, a la distribuidora de la vacuna en Toledo (España), para que una inspectora de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) recogiese la copia de seguridad para España y su manual de producción y lo remitiese al Instituto de Toxicología de Sevilla, para su estudio.
El manual y las copias posteriormente han sido entregados vía judicial al padre que viene investigando la muerte de su hijo, que solicitó tales evidencias.
Es obvio que genera gran inseguridad, nos deja un tanto perplejos, que las copias de seguridad de las vacunas que se venden en España y sus manuales de producción no se encuentren en manos de la Agencia Española de Medicamentos sino en los laboratorios fabricantes y que para obtener tales muestras los ciudadanos tengamos que acudir a la vía judicial.
Según esta certificación del laboratorio Glaxo al momento de su fabricación y envasado, el contenido real de aluminio por mililitro de la vacuna Infanrix IPV+Hib es de 2,71 miligramos de aluminio, lo cual supone que 0,5 mililitros de vacuna (una dosis) contiene 1,35 miligramos aproximadamente. El contenido de aluminio detectado, es casi tres veces superior al del prospecto: ES UN FRAUDE A LA SALUD PÚBLICA.
Además, podréis observar que esta farmacéutica trabaja con márgenes entre 1,60 mg y 2,90 mg por un mililitro de vacuna, por lo que parece práctica asumida por este laboratorio excederse con más aluminio de lo prescrito en los prospectos: Lo repetimos la ficha técnica de la infanrix IPV+Hib recoge 0.5 mg y ese volumen se incumple con dicho resultado y esos márgenes.
Por otra parte, los resultados del laboratorio Doctor,s Data al que se remitió LA COPIA DE SEGURIDAD DE ESTA VACUNA PARA TODA ESPAÑA, ponen de manifiesto que la copia maestra de referencia de esta vacuna para nuestro país, en el lote y serie administrado al pequeño fallecido sospechosamente por este fármaco, dio un 32% más de lo prescrito en su ficha técnica: 0.82 mg/0.5 ml. Según Doctors Data, debiera contener 0.5 mg/0.5 ml según la ficha técnica y prospecto de la AEMPS.
Es una grave irregularidad que los contenidos de este adyuvante -el aluminio se usa en las vacunas para aumentar su efecto inmunitario- no sean ni por aproximación los que se recogen en los prospectos y fichas técnicas oficiales. La ficha indica 0.5 miligramos y los resultados de los análisis que viene realizando dicha Asociación en laboratorios independientes, reconocidos por la UE, dan 1.35 mg, 1,45 mg, y las copias de seguridad para España de la IPV+Hib dan como decimos 0.82 mg.
Los motivos del laboratorio para excederse del contenido técnicamente prescrito se desconocen, pero es obvio que estos adyuvantes sirven para conservar y potenciar los efectos de la vacuna y que sin duda es un componente tóxico.
Es muy sospechoso que en la documentación del manual de producción y en la posterior para autorizar la venta, puedan encontrarse dos certificados claramente contradictorios en los análisis de aluminio que certifica Glaxo. Por una parte, tenemos el resultado de los análisis al momento de finalizar la fabricación y envasado final de la vacuna en septiembre de 2011, que ofrece 1.35 mg de aluminio por dosis de 0.5 ml. Esta es una evidencia del incumplimiento y coincide con los resultados que viene dando Doctor,s Data.
Por otra parte, está el análisis posterior del mismo Glaxo, cinco meses después de la fabricación y envasado, justo al momento de la autorización para la puesta en mercado y venta del lote-serie, que da un resultado correcto sobre un muestreo hipotéticamente bien realizado (el certificado es de febrero de 2012 y nos deja perplejos pues ahora sí se ajusta al 0.5 mg/0.5 ml de vacuna, del prospecto y ficha técnica).