Como Pedro por su casa entró Rato en el
despacho del responsable del Ministerio del Interior del Gobierno, se supone
que de España, al menos se piensa que representativo de TODOS los españoles.
Hay que agradecer que esta derecha sea tan explícita y directa, sin tapujos el cortijo es suyo y pueden hacer lo que
quieran, para qué andarse con tonterías. Luego va el ministro y aumenta el
estropicio con sus declaraciones, resulta que eran asuntos particulares; según
Rato habló con el ministro de todo lo que le está pasando, se siente amenazado
por las redes sociales, al igual que miles de españoles, sean políticos,
intelectuales, deportistas, actrices, músicos… periodistas o blogueros y
opinantes.
Nada, no pasó
nada, dice Rajoy, el ministro lo aclarará.
Pues eso es lo malo la sensación de impunidad con los delitos y la sensación de
propiedad del estado por parte de esta gente. Y que no pasa nada. Son tan
frikis que lo hacen convencidos de que no pasa nada, -viva la Pepa- Luego se
levanta polvareda y hasta intentan justificarlo pero con ñoñerías de colegio.
Trágico, si el estado lo manejan como su
propiedad particular, alejan a la gente de los símbolos nacionales, expulsan de
la identidad española a millones de personas que se sentirán fuera de esa cosa
común que tiene mucho parecido con reminiscencias italianas. Y lamentable que
las fuerzas de derecha no peperas no se den cuenta del tremendo daño que hacen
al país. Chorizos, ladrones, mafiosos… corren como locos a pedir cita al
ministro del interior para hablar de lo suyo. Los pobres? la gente normal? Manifestantes,
Trabajadores? Jubilados, parados, desahuciados, dependientes… La gente de bien
en suma, queda fuera de las atenciones del gobierno.
Lo de los Mossos y la muerte de Mor
Sylla, mantero que vivía en Salou tiene miga. Lo que sucede y las
explicaciones. Una persona cayó por un balcón, se mató. Un contingente de
mossos acude a una vivienda en plan redada criminal, no, no piensen mal, no se
trataba de un caso de decenas de millones de euros defraudados, robados,
escaqueados por las grandes familias catalanas, ni de fraudes centenarios de
grandes empresas. La violencia de los Mossos en Catalunya es recurrente, cuando
no es represión a palos de manifestaciones, es una detención con extremada
dureza que causa fallecimiento, o vídeos de palizas en comisaria… Que la
explicación de los frikis responsables de la Generalitat sea que no hay nada
que investigar porque es creíble la
versión de los agentes, es vergonzoso.
Sea creíble la versión, o no, que una
actuación contra el top manta termine en una muerte, obligatoriamente, debería
requerir una investigación, como poco para cambiar protocolos de actuación.
Luego llegan los frikis de la administración, la prensa o votantes, y empiezan
a enmierdar la cosa, que sin son negros,
mafias de 100 individuos, grupos que viven hacinados en viviendas…
Mafias organizadas son las que esquilman
los dineros públicos utilizando obras, concesiones y comisiones, entre
familiares, mandatarios o cercanos a sonantes apellidos catalanes, y las
actuaciones de los mossos no les causan bajas. Y les juro que distraen
cantidades ingentes de dinero muy superiores a esos grupos negros que venden
bolsos, camisetas o Cd’s. En estos momentos Catalunya se podría identificar con
la realidad descrita en ‘La Brecha’, estremecedor relato de las dos sociedades,
dos justicias que se viven en EEUU.