Revista Cultura y Ocio

Fuendetodos y la ruta de Goya (Zaragoza)

Por Yorga @javieramosantos
Fuendetodos, emplazado en medio de un paisaje desolado, de calor agobiante en verano y de inviernos muy fríos a causa de su altitud (800 metros), es un pueblo de apenas 170 vecinos que no ha cambiado mucho desde que allí vino al mundo un 31 de marzo de 1746 Francisco de Goya y Lucientes. Una placa colocada en la humilde casa de piedra que le vio nacer esa fecha que transformó la historia de la pintura “para honor de la patria y asombro del arte”. Quizás no sea uno de los lugares más turísticos de la hermosa Aragón, pero solo por la historia que aguarda merece la pena su visita. La casa se halla situada en la parte baja del pueblo, en concreto en la calle de la Alhóndiga.En 1916, el pintor vasco Zuloaga adquirió la casa de Goya, que había sido construida a principios del siglo XVIII, e instaló en ella un museo para que permaneciera el legado goyesco. Frente a la vivienda se colocó un busto del genial pintor. La tosca construcción, similar a la de cualquier otra familia de labradores de la zona, se restauró en 1982. La casa de Goya es el principal reclamo de Fuendetodos./fundacionfuendetodosgoya.org La casa de Goya posee planta baja con zaguán, cuadra y cocina. En el piso alto se hallaban la sala y dos alcobas. El granero, en la parte superior, completa las estancias. Con el fin de reproducir los tiempos de Goya de la forma más fidedigna posible, se han instalado muebles y enseres del siglo XVIII. Se exponen además cuadros y documentación gráfica. La huella de Goya no pervive únicamente en su casa natal. En 1989 se abrió el Museo del Grabado, con las colecciones de Los desastres de la guerra, Los caprichos, La tauromaquia y Los disparates. En Fuendetodos, el viajero puede visitar el pueblo de casas de piedra sin labrar y cubiertas de teja árabe, así como también acercarse a los hitos más destacados si sigue una red de senderos de pequeño recorrido que circunda el pueblo; por él se llega hasta losneveros, construcciones de piedra de gran profundidad en las que antaño se guardaba la nieve durante los inviernos para venderla en verano como hielo, cuyas barras se transportaban de noche a Zaragoza en carro. Los senderos conducen igualmente a viejas ermitas, a trincheras de la Guerra Civil, a minas de piedra caracoleña (la empleada para hacer el puente de Piedra de Zaragoza) y a parajes naturales de gran belleza. Fuendetodos cuenta con una hospedería y una oferta atractiva de turismo rural para aquellos viajeros que busquen alojarse a precios asequibles. Destino ideal para hacer una escapada de fin de semana. Utensilios y mobiliario de la casa natal de Goya./fundacionfuendetodosgoya.org Las carreteras son la vía mas rápida para llegar a Fuendetodos, pero no la única, pues hace años que se señalizó un camino sin asfaltar el cual, si el viajero parte de Zaragoza, llega hasta el pueblo de Goya atravesando la Plana de María, una meseta reseca que, al final, de manera inesperada, se transforma en un tupido pinar. Si se hace este recorrido a pie puede resultar muy largo y pesado, pero recorrerlo en bici de montaña es plenamente factible. Otra manera complementaria de disfrutar de uno de los mayores lugares con historia de la comunidad. La ruta de Goya puede proseguir por la localidad de Pedrola, con el Palacio de la Duquesa de Villahermosa, que alberga del genial pintor El baile de las máscaras, un boceto de La carga de los mamelucos y un retrato de Ramón Pignatelli. En Muel es obligado en la ermita de la Virgen de la Fuente, de 1770. Goya recibió el encargo de decorar las cuatro pecunias, en las que pintó sobre el muro de yeso las figuras de los padres de la Iglesia. Otra población a tener en cuenta es Alagón. El antiguo colegio de los jesuitas, reconvertido en Casa de Cultura, alberga un fresco de Goya de 1765. La presencia de Goya en la capital zaragozana también es de enjundia. La visita del viajero pasa por la Basílica del Pilar, en la que el artista pintó en su bóveda del Coreto La adoración del nombre de Dios y la cúpula Regina Martyrum. La siguiente parada es el Museo de Zaragoza, entre cuyos fondos resaltan retratos de personajes relevantes: Carlos IV y María Luisa de Palma, Fernando VII… La galería exhibe otras obras de temática religiosa como El sueño de San José o La muerte de San Francisco Javier. Museo del Grabado de Fuendetodos./fundacionfuendetodosgoya.org El Museo Ibercaja Camón Aznar, ubicado en el Salón Dorado del Palacio de los Pardo, expone las colecciones donadas por el aragonés que le ha dado nombre. Expone las cuatro series de grabados completas de Goya; en total, 221 grabados originales. A unos 11 kilómetros de Zaragoza se alza la Cartuja de Aula Dei, un monasterio de los siglos XVI y XVIII donde Goya elaboró en 1774 once pinturas murales al óleo de las que se conservan siete. Todas se centran en la vida de la Virgen María. También la vecina provincia de Huesca alberga obras del artista aragonés. El Museo de la localidad conserva el legado de Valentín Carderara, donde sobresalen varias piezas de Goya: los retratos de Doña Isabel de Borbón y de Doña Margarita de Austria, dos aguafuertes de 1778, el retrato de Don Antonio Veián y Monteagudo, sin olvidar Los Toros de Burdeos, cuatro litografías de interés. Dónde dormir: Albergue juvenil Fuendetodos; Paseo de Vistalegre, 2; 50142 Fuendetodos (Zaragoza); [email protected]; teléfonos: 976143867 y 690233590. Dónde comer: Restaurante La Rebotica; Calle San José, 3; Cariñena (Zaragoza); teléfono: 976620556.

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