Revista Cultura y Ocio
Imitando aquel famoso anuncio de colonia, podríamos decir que en las distancias cortas es donde la pluma de un escritor se la juega. Y es que, en efecto, en diez líneas no hay demasiadas posibilidades de engañar a los lectores: o los convences con rapidez o, al cabo de tres relatos, los has perdido. De ahí que apuestas como la que plantea Javier Puche en su libro Fuerza menor resulten tan peligrosas y tan admirables. Primero, porque se adentra en zonas mefíticas, donde no siempre está garantizada la seguridad o la supervivencia del narrador; y segundo, porque consigue salir airoso del reto.En este libro, publicado exquisitamente por el sello andaluz La isla de Siltolá en su colección Nouvelle, nos encontramos con un memorable vademécum donde mil sorpresas agradables nos asaltan de diferentes modos: la edificación (y posterior disolución) de una pareja a través de un hermoso y significativo juego de sombras (“Asincronía”); narraciones cuyo argumento habría fascinado a Jorge Luis Borges y cuyo desarrollo literario habría encantado a Cortázar (“El secreto del universo”); textos breves y estremecedores sobre las religiones, el odio y el absurdo (“La partida”); páginas de eficaz humor negro, que Javier Puche destila en relatos como “Taxidermia S.L.” o “Néstor salta”, entre otros; o composiciones de una lírica tierna y bellísima, como la que puede observarse y degustarse en “La marioneta” o “La memoria de cristal”. Este resumen, desde luego, no agota las virtudes del volumen, mucho más proteico de lo que puede condensarse en una reseña periodística.Y por fin, como cierre del tomo, el bloque llamado “SEÍSMOS”, que está formado por una colección de minificciones de seis palabras. Son sesenta propuestas que pueden quedar bien resumidas en, cómo no, seis ejemplos: “Drácula atracó un banco de sangre” / “Sonríe el ciego ante la stripper” / “Hombre-bala busca ansioso mujer-cañón” / “Entre caníbales, está prohibida la felación” / “Entró al caleidoscopio el camaleón suicida” / “Pablito, recoge de inmediato los cadáveres”.Si desea usted acercarse a un libro lleno de calidad y de ingenio le aconsejo que abra las páginas de éste. La Fuerza, sin duda, lo acompañará.