Futbolistas… esa panda de insolidarios
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Cada vez que oigo seguidas las palabras huelga y futbolista se me pone la piel de gallina, me entra dolor de cabeza y se me descompone todo el organismo. Y les aseguro que no es porque me vayan a privar del placer de ir al campo el domingo; no, no es por eso. Simplemente me indigno y sorprendo por el grado de insolidaridad y ombliguismo al que pueden llegar algunas personas. ¿Qué los futbolistas van a la huelga porque creen que sus derechos están siendo vulnerados? ¿Me están vacilando, o qué?
Me parece de risa, por no decir, indignante, que gente que cobra tantísimo dinero encuentre algún motivo para prostituir un instrumento que fue concebido para defender los derechos de la clase trabajadora frente a los abusos del “capitalismo”. Me parece inaudito que todos estos chicos musculados protesten porque les obliguen a pagar los impuestos que les corresponden, sin sociedades interpuestas ni maquillajes contractuales creados exprofeso para pagar menos al fisco. ¡Cómo me cabrea que amenacen con suspender la penúltima jornada de Liga! ¡Por mí como si la anulan desde ahora mismo!
Que se vayan a sus casas o a llorar al valle, que ahoguen sus penas en alcohol o que organicen un campeonato de futbolín en sus mansiones. Yo les puedo asegurar que no derramaré ni una lágrima por verlos desaparecer una temporada del panorama mediático. No me dan nada de pena, más bien nunca entenderé cómo puede haber gente que apoye a esta panda de insolidarios que sólo saben mirar por sus intereses económicos y que, cobrando lo que cobran, se atreven a insultar a la mayor parte de la sociedad española diciendo que van a hacer un paro para evitar que se vulneren sus derechos.
Desde aquí reto a Íker Casillas, Xabi Hernández o Andrés Iniesta que tengan la valentía de explicar este despropósito a todas las personas que les idolatran. Que se lo digan al padre de cuatro hijos que lleva tres años en el paro y que busca de donde no hay para poder seguir a su equipo; que se lo expliquen a la abuela que lleva dos ayudando a salir adelante a sus hijos con su pensión de 400 euros, que se lo cuenten a todas las familias que han sido desahuciadas sin pudor ni escrúpulos… que le digan a toda a esta gente que sienten perseguidos por Hacienda y que no quieren pagar los impuestos que les corresponde.