Galletas para el 40 cumpleaños

Imagino que a estas alturas ya sabréis que a finales de febrero celebramos en casa los 40 años de Rafa, mi marido.

Y también que quisimos que a nadie le quedase la duda de que no eran ni 39 ni 41, sino 40...Así que las galletas que regalamos a cada invitado no podían dejar de tener el número en cuestión.

Compré unos cortadores con los números, pero no tenía claro si iba a hacer una galleta en forma de número, una galleta redonda y hacer el número con fondant... Y hablando un día con Sor Pastelito, llegamos a una conclusión: lo mejor iba a ser hacer una galleta redonda pero con el número en caramelo.Muy dispuesta compré los caramelos que utilicé para las Galletas de Cristal con Jengibre y Canela que hice en Navidad. Son de sandía, y me gustan porque son los únicos caramelos que no pierden el color al derretirse en el horno.La receta que utilicé es la misma que suelo utilizar para las galletas de mantequilla, y que podréis ver aquí.Así que una vez hecha la masa, reposada y estirada, cortamos las galletas en círculo, teniendo en cuenta el tamaño de los números que queremos recortar dentro.Al ser los números pequeños y más intrincados que otros cortadores, antes de cortarlos volví a meter las galletas en el frigo, para que se endureciera otra vez la masa.Al sacar las galletas, pasé los cortadores por harina antes de cada corte. Así además, me aseguro que los números, que descartamos para estas galletas, se puedan retirar con facilidad y puedan ser "reutilizados" para hacer más galletas...

Reparto las galletas en la bandeja, sobre papel de horno, y reparto en caramelo en los huecos formados por los números. En cuanto al cero, coloqué un caramelo entero en el centro del cero, y encima, el hueco en masa. No sabía si quedaría bien, así que la primera hornada fue un poco experimental.

Pero funcionó. El caramelo, al derretirse, se distribuye bien bajo el trocito de masa de galleta, formando un cero casi perfecto.Una vez horneadas mis galletas de cristal, me quedaban los números...Coloqué un número un poco sobre el otro, presioné, y al hornear, se quedó un 40 bien firme.