En el análisis de Gamesa de marzo propusimos un escenario altamente bajista, en contraposición a las voces reinantes de adquirir una ganga a largo plazo.
Desde mayo ha desarrollado un canal bajista desacelerando la pendiente de caída, concluido con un sobretiro hasta el precio de 1 €, donde el sentimiento de mercado reflejaba un pánico absoluto. La vela diaria de afirmación tras el gap de escape de rigor, propició la entrada en el valor.
Posteriormente, la tendencia alcista acelerada retrocede hasta la mitad del impulso, donde un doble apoyo con dilatación (conociendo las técnicas operativas de las “trampas” de mercado, obtenemos una ventaja sobre el resto de especuladores) brinda una opción de compra clara, con un primer take profit en el máximo previo (1.94) y otro en la duplicidad del impulso (2.4)
El stop profit es dinámico, deslizándose al son de los mínimos crecientes del canal verde.
La última estación para incorporarse al tren alcista de Gamesa ha sido señalada por la intersección del canal, con el throwback al triángulo chartista de continuación.
La superación en cierres del 1.94 mencionado activa el siguiente objetivo: 2.4