Los dos grandes de España vencieron, pero no convencen
El Real Madrid ganó 3-0 al Espanyol en el Santiago Bernabéu. Por el resultado, debería de tratarse de una amplia goleada en la que aplastaron a los de Catalunya, pero no fue así. Salvo el primer gol de penal, ejecutado por Cristiano Ronaldo, el resto de goles vinieron casi al final del encuentro. Tras un pase de CR7, Gonzalo Higuaín convirtió el tanto de la tranquilidad. El abrazo entre el "7" y el "20" arrancó aplausos de las gradas. Tras las especulaciones de roces entre ellos, con ese gesto quisieron demostrar que tales rumores no son ciertos. Sin embargo, ambos delanteros están muy individualistas últimamente y ello no favorece al equipo.El que se acordó de anotar fue Karim Benzema. El francés no la pasó bien la temporada pasada porque el Pipa le arrebató el titularato a base de goles. Actualmente, Mourinho lo tiene en la banca aunque le ha manifestado que cree en su capacidad. En Madrid esperan que este tanto le haya dado confianza al francés. El "9" no debe dormirse en sus laureles y pelear palmo a palmo con Higuain la posibilidad de estar en el once inicial. Fue una victoria sin discusión, pero sin brillo.Con el solitario gol de Villa, el Barcelona se mantiene al acecho de la punta y suma tres puntos necesarios. El "Guaje" anotó a los 49 minutos para el cuadro azulgrana, que esta vez no exhibieron un excelente juego. No obstante, fue merecido el triunfo de los culés, su rival no les dio mucha preocupación en el ataque pero que estuvo sólido en defensa.Fue el primer encuentro que no contaron con Lionel Messi, el argentino todavía sigue lesionado tras la dura entrada de Ujfalusi en el clásico contra el Atlético de Madrid. Muchos se quedaron las ganas de ver magia, pero el conjunto de Guardiola no lució mucho. Los blaugranas se plantaron inteligentemente y siguieron su libreto de su estilo de juego. Propusieron y tuvieron la posesión del balón hasta que se quebró el cero. David Villa está siendo rentable y logra que casi no se murmure acerca de la polémica salida de Zlatan Ibrahimovic. El Barcelona no quiere dejar escapar más puntos y va a la caza del Madrid y el Valencia, punteros de la Liga.