Gante, una ciudad para la caballería

A un corto paseo en tren desde Bruselas tenemos Gante. 
La estación está un poco apartada del centro histórico de la ciudad, o bien se llega a través de un paseo o se puede coger uno de los tranvías que salen de la puerta de la estación.
A medida que te acercas al corazón viejo de Gante parece que entres en otra época. Fácilmente puede ser el escenario de películas caballerescas.
La vista más característica de la ciudad es el Muelle de las Hierbas, desde su puente   (Puente San Miguel) tuve la sensación de estar ante una de las vistas más bonitas e impresionantes de toda Europa. El antiguo puerto medieval esta repleto de terrazas y restaurantes que dan mucha vida a la zona.

Muelle de las Hierbas

El castillo de los condes de Flandes es uno de los puntos más interesantes de la ciudad, fue construido en el siglo XII y se conserva en muy buen estado. Se puede entrar a visitarlo.

Castillo de los Condes de Flandes

A un lado del puente San Miguel nos encontramos con la iglesia San Nicolás que data del siglo XII y es otra joya del gótico que se tiene que visitar.

Iglesia San Nicolás

Todas estas atracciones están cerca unas de las otras, cosa que hizo posible visitar la ciudad en un día, ya que nuestra base era Bruselas.
Al hacer unos días soleados y primaverales se veía a la gente salir a la calle a aprovechar el sol que tan escaso es para ellos y eso creaba mucho ambiente en todas las ciudades belgas que visitamos. La gastronomía del país viene a ser bastante parecida a la francesa y holandesa con fuertes toques de otras culturas.
Todo el mundo que había visitado el país me hablaba maravillas, la verdad es que Gante quedaba un poco eclipsado por Brujas, pero a mi me ha encantado, creo que es una ciudad mucho más real que Brujas y también con un fuerte contenido histórico.   
*** si se quieren visitar varias ciudades de Bélgica en tren es recomendable comprar en la estación un billete para diez viajes. Sale mucho más económico que si se va pagando individualmente los trayectos. El precio del bono son unos 72 euros y no es unipersonal, así que se puede compartir con el compañero de viaje.