Anaiz Zamora Márquez
Cimacnoticias Durante los conflictos armados las mujeres y niñas ven severamente vulnerados sus Derechos Humanos (DH), ya que en muchas ocasiones son violadas sexualmente o sometidas a severas formas de tortura; al terminar las guerras sus contextos no cambian, pues enfrentan severos obstáculos para acceder a los recursos naturales, denunció ONU-Mujeres. En su más reciente informe, “Mujeres y recursos naturales. Liberar el potencial de consolidación de paz”, la instancia de Naciones Unidas advirtió la necesidad de empoderar a la población femenina para que participe activamente en los procesos de reconstrucción tras conflictos bélicos. Al recordar que en medio de las hostilidades generalmente las mujeres son las responsables de garantizar el suministro de agua, comida y de controlar los recursos naturales, ONU-Mujeres instó a los gobiernos a garantizar el acceso a la población femenina a estos recursos, “especialmente a la posesión de la tierra”. Publicado en el marco del Día Internacional para la Prevención de la Explotación del Medio Ambiente en tiempos de Guerra –que se conmemoró el pasado 6 de noviembre–, en el documento se denuncia que la violación al derecho de las mujeres a acceder a los recursos, así como la degradación de la calidad de éstos, limita al mismo tiempo su productividad económica y capacidad de recuperación.Lo que a la vez repercute en que ellas vuelvan a ser vulnerables de padecer violaciones a sus DH, pues no podrán acceder a una adecuada alimentación para sí mismas y las personas vulnerables a su cargo.
En ese sentido, ONU-Mujeres apuntó que históricamente se ha excluido a las mujeres de los procesos de paz y de la redistribución de los recursos generales, con lo que a nivel global se perpetúa la marginación en la que viven.
“Permitir a las mujeres poseer la tierra es la puerta de entrada para el empoderamiento femenino a través de la capitalización de su capacidad productiva”, recalcó el organismo.
Para responder a los riesgos que enfrentan las mujeres después de un conflicto armado, la instancia propuso a los países miembros de Naciones Unidas y a la comunidad internacional garantizar la participación femenina en los procesos de legislación en materia de repartición de los recursos naturales y el territorio.
Asimismo, se deben adoptar las medidas necesarias para proteger a las mujeres de las consecuencias relacionadas a la violencia psicológica y otros riesgos de seguridad que puedan correr dentro de los procesos de paz.
Igualmente se debe garantizar la participación activa de las mujeres, ya sea como líderes o representantes, en la reconstrucción postconflicto armado.
Publicado por Género con Clase