Revista Belleza
Gracias al equipo de TRND España he podido probar Olia, la nueva coloración sin amoniaco que ha lanzado Garnier. Me ha alegrado mucho este lanzamiento porque Garnier es una marca que me gusta mucho y, en mi opinión, hace tiempo que deberían tener entre sus distintas líneas una sin amoniaco.
Según la marca, las características principales de Olia son:
La fórmula
Contiene cuatro aceites de flores, de ahí que su fragancia sea muy agradable al olfato, con un suave aroma que resulta de lo más femenino (y además, no contiene amoniaco).
La textura
La coloración se vuelve sencilla gracias a su textura aterciopelada, como una crema, rica y ligera. Su aplicación es tan fácil que parece una mascarilla para el cabello.
El diseño
Además de estético, es funcional porque se adapta perfectamente a nuestra mano. Como podemos ver en la imagen, el diseño tiene forma de gota, para conseguir una aplicación más precisa.
El resultado
Una máxima eficacia colorante: 100% cobertura de canas, un cabello más brillante y un 35% más suave.
Mi opinión:
La crema resultante de la mezcla del tinte con la crema reveladora es muy fácil de aplicar, realmente parece que nos estemos aplicando una mascarilla tanto por la textura como por el olor. No huele en absoluto como otros tintes, es un olor suave y floral.
El frasco aplicador resulta un poco incómodo a pesar de su diseño ergonómico. Al menos a mi me resbalaba un poco con los guantes.
El tubo de acondicionador tiene mucha cantidad de producto y podemos utilizarlo en más de una aplicación.
El cabello queda suave y brillante con un agradable aroma a flores.
Repetiré con Olia? Pues seguro que si!