Gary clark jr. en madrid: mucha clase [crónica]

Fotografía: Javier Carrasco

Tal y como tuiteé, Gary Clark Jr. sigue molando seis años después de aquel Mad Cool. Semejante afirmación no admite discusión. Entonces su premiado This Land no formaba parte de su discografía todavía. El músico texano regresó a Madrid horas antes de actuar en Sevilla y poco después de hacer lo propio en Lisboa. En ambos casos como artista invitado de Guns N' Roses en su gira mundial.

Aunque el comienzo de nuestro concierto estaba programado a las 21:30 horas en La Riviera, Gary Clark Jr. se hizo de rogar unos 20 minutos. Mientras algunos ya se estaban impacientando, otros agradecieron el retraso porque apuraron fuera. Es más, instantes antes, cuando aún no había anochecido, había una fila considerable para acceder a la sala. ¿Estaría al tanto el personal rezagado de que el cantaor flamenco Israel Fernández había sido el telonero elegido para la ocasión? Por cierto, el mismo Israel Fernández que compartió una fotografía con Mick Jagger antes del último —y único— concierto de los Rolling Stones en España este año. Lástima, otra vez será... y me refiero a disfrutar de Israel en directo.

Fotografía: Óscar Rojano

El caso es que ya estábamos todos dentro cuando se apagaron las luces. A continuación sonó una base para dar paso sobre el escenario a Gary y sus músicos: King Zapata (guitarra), Jon Deas (piano, teclados, sintetizadores), Elijah Ford (bajo y guitarra) y JJ Johnson (batería).  Primeros punteos y el público ya estaba en el bolsillo. Lógico y normal. Parece mentira que solo tenga 38 primaveras. Con ese porte, el traje, los zapatos, el sombrero y semejantes maneras con la guitarra entre las manos, definitivamente estábamos ante un bluesman veterano. Mucha clase. Tanto él como sus compañeros porque nadie desentonó en ningún sentido.
La Riviera no se llenó, pero en cualquier caso, tratándose de un lunes, la entrada fue muy buena. De hecho, en la penumbra, escuchando tantos aullidos y palmas entre el público al son de Feed the Babies primero y Bright Lights después, daba la sensación de que allí nos habíamos reunido muchos más. ¡Qué bárbaro! ¡Qué manera de tocar! Un par de canciones y volaron otros 20 minutos.   "¿Qué tal? How yo doing? How you doing?", saludó desde allí arriba antes de sacar a relucir el falsete en I Walk Alone. Sin tener una voz portentosa, nadie tardaría demasiado en llegar a la conclusión de que algo tiene. Algo chamánico —por tratar de describirlo de alguna manera— que capta tu atención con suma facilidad. Cambio de guitarra, pero ni los riffs ni la entrega por parte del público se resentían.  Otra constante a lo largo del concierto fue This Land. Su disco de 2019 resultó ser el protagonista del setlist, como cuando sonó What About Us tras una hora de concierto. En segundo lugar, Blak and Blu de 2012, porque temas como Next Door Neighbor Blues o When My Train Pulls In tampoco faltaron. En definitiva, Gary Clark Jr. es uno de esos artistas a cuya llamada hay que acudir siempre, hayas escuchado más, menos o nada. Ten por seguro que él cumple, ya sea en un festival en Valdebebas, tocando bajo un sol de justicia para un público que no es el suyo, o en una sala como La Riviera, en horario nocturno y ante sus seguidores. Además, con estos animales de directo lo secundario es qué tocan exactamente. Lo importante es cómo hacen que disfrutes de cada nota. Solo había que ver a aquella mujer bailando extasiada a escasos metros del escenario mientras los riffs y las distorsiones se sucedían...