El uso de suplementos como los geles energéticos está cada vez más extendido entre los deportistas aficionados que practican deportes de resistencia, como puede ser el ciclismo o el running.
Los geles energéticos están elaborados específicamente para ingerirlos durante la práctica deportiva, y por este motivo es importante tener una serie de conocimientos sobre ellos para utilizarlos correctamente y sacarles el mayor partido posible.
Qué son los geles energéticos
Los geles son suplementos alimenticios destinados a deportistas que realizan deportes de resistencia en los que es muy importante tener en un nivel adecuado las reservas energéticas del organismo para poder superar la prueba deportiva en cuestión.
Con el consumo de geles energéticos estaremos aportando a nuestra musculatura la energía necesaria para que éstos sigan rindiendo a un nivel óptimo.
Los geles se venden en bolsitas monodosis de unos 50 gr para facilitar su consumo durante la actividad deportiva.
Composición de los geles
Los geles energéticos están compuestos principalmente por hidratos de carbono simples. Estos hidratos de carbono son los que se absorben más rápidamente en el organismo y por lo tanto aportan la energía a nuestros músculos de manera muy rápida.
Durante el ejercicio físico nuestros músculos van consumiendo energía, y ésta procede del glucógeno. El glucógeno se almacena en nuestro organismo en los propios músculos y en el hígado, y lo hace en forma de hidratos de carbono.
Por lo tanto con el consumo de geles estamos impidiendo que nuestro organismo consuma todas las reservas energéticas que tiene, ya que cuando esto ocurre aparecen las temidas pájaras.
En cuanto a la composición como tal, están compuestos por hidratos de carbono, sales minerales y generalmente de alguna sustancia estimulante como puede ser la cafeína.
El mayor porcentaje en su composición corresponde a los hidratos de carbono, ya que este componente es el que nos va a aportar mayor energía. En torno al 70% de la composición de los geles son hidratos de carbono.
Las las eliminamos durante la actividad física con el sudor, y por ello es también importante consumirlas durante el ejercicio. Las sales minerales además ayudan a la absorción de los hidratos de carbono.
Sustancias como la cafeína también suelen ser incluidas en los geles energéticos. Y es que estas sustancias tienen carácter estimulante y además reducen la sensación de fatiga.
Utilizar correctamente los geles energéticos
Como hemos comentado en el apartado anterior, los geles tienen una serie de componentes que nos van a ayudar a mantener los depósitos energéticos llenos y por lo tanto tener un buen rendimiento deportivo. Pero hay que consumirlos correctamente para que su consumo no nos perjudique.
La primera recomendación es probar los geles antes de una competición o carrera, ya que puede ser que no nos siente bien al estómago. En el mercado hay multitud de marcas, por lo tanto lo ideal es probar unas cuantas hasta dar con la que mejor nos funcione.
Tampoco hay que abusar de su consumo, ya que nos están aportando una energía rápida debido a los hidratos de carbono simples que llevan en su composición. Por lo tanto lo ideal sería tomarlos en momentos determinados donde se necesita un chute extra de energía.
También hay que acompañar su consumo con agua, ya que son bastante viscosos y el agua ayudará a su asimilación. Además si lleva cafeína, ésta deshidrata por lo que hay que ingerir agua.