A pesar de resultar repetitivo, lo cierto y demostrable es que el socialismo se mantiene en el poder gracias a la compra de votos con el dinero saqueado a los ciudadanos y nunca gracias a una buena gestión de gobierno. De ahi que muchos se pregunten ¿Como puede ganar unas elecciones un partido que deja un reguero de parados tan inmenso? ¿Como puede ganar unas elecciones un partido que deja al pais con las arcas vacias? La respuesta es muy sencilla: Un sector de la población o más bien del electorado y perfectamente calculado se vé favorecido sistematicamente con el dinero de todos. A sabiendas que una parte de la población no les va a votar, ponen todo su empeño en favorecer a aquellos colectivos de donde saben que a cambio de ayudas obtendrán el voto aún a costa de hacer de estos colectivos unos verdaderos parásitos improductivos y que por tanto no ayudarán a sacar al pais adelante, porque sus ayudas no lo son para mejorar la situación deficitaria del pais sino para su procurar su mantenimiento en el poder porque a la postre la mayoria de ellos, los socialistas, viven de la politica y por lo tanto no tendrian la oportunidad de vivir mejor fuera de ella.
Todo este sistema de retroalimentación entre socialistas y parásitos no hará mas que seguir socavando en el agujero del deficit que ya alcanza más del 16% del PIB, con lo cual necesitaremos de muchas generaciones para estabilizar la economia pues la losa de parasitos que nos dejan es inversam,ente proporcional a la de productores de se necesitan para sacar al pais adelante, es más en algunas comunidades como Andalucia, carente de infraestrcturas industriales, esta bolsa de improductivos es una rémora enorme para el crecimiento economico y por lo tanto para la creación de empleo, donde siempre que esté en manos de socialistas se creará un empleo improductivo en las administraciones autonómicas que no hará otra cosa de agrandar el deficit público y acabará por estallar por su propia insostenibilidad, llegando al punto no muy lejano en que algunas administraciones, ya sean locales o autonómicas no podrán hacer frente a las nominas de sus funcionarios ni a los pagos a proveedores que acabarán por negarse a trabajar para éstas administraciones con el consiguiente daño a la inversión pública en infraestructuras, colegios, sanidad etc....Es duro decirlo pero alimentar la permanencia en el poder a base de dirigir los impuestos de los ciudadanos a mantener el monstruo administrativo que han creado no tiene otro final mas que el caos.
En una democrácia donde se carece de los niveles de control, donde los interventores municipales han dejado de existir porque no hay independencia sino subordinación a los poderes establecidos, el manejo del dinero público al libre albedrio del poder representa un deficit democrático y por lo tanto convierte a la democrácia en tirania.
Estigma