Sin darte cuenta pasan los años, y sin darme cuenta en noviembre de este año, se cumplirán diez años ya del fallecimiento de George Harrison.
Así es la vida amigos.
Este es un disco que se me antoja maravilloso, estupendo y que me encanta de principio a fin.
La magia de este disco es que aparte de George, está Jeff Lynne como co-productor y que también participa en la composición de algunos temas, así como a las guitarras y a los teclados.
Por ejemplo escucha la maravillosa e indescriptible This Is Love, es ELO total, pero también es la mejor definición posible del talento de los dos músicos juntos.
También hay más músicos amigos, como Ringo Star, Eric Clapton o Elton John, pero para mí la mágia reside en los dos primeros.
Y dejo clara una cosa, sabeis que los punteos de guitarra me atraen más bien poco, pero que quereis que os diga, George o Jeff nunca los utilizaron como exhibicionismo de perfección, ni como parte fundamental de los temas, y a mí esos sonidos me parecen que vienen del espacio.
Los temas son Rock, pero pasables por el filtro de Jeff, ese filtro que convierte las cosas en apetecibles, vendibles, pero no horribles, eso nunca.
Got My Set On You fue el single de salida y un éxito en todo el mundo. When We Was Fab es más que un guiño a The Beatles.
Con diferencia y muchas, en los cuatro ex-miembros siempre hubo amistad, y aunque John y el propio George parece como si quisiesen olvidarse de todo ese pasado Beatle, la verdad es que pesó siempre mucho, pues no en vano puede, y digo puede, que sean el mejor grupo de la historia. Y de eso no te puedes apartar tan facilmente.
Después de este inciso, pues simplemente decir que aquí hay baladas maravillosas y también buenos momentos de Pop.
Un disco homogéneo, compacto, que en todo momento está a gran altura.
Como curiosidad comentar que como cara b de un single, Harrsion quería meter Handle Whit Care, pero la compañía le dijo que era demasiado bueno. Y así, no sólo no fue cara b, sino que fue un superéxito del grupo que os comenté hace unos días, Traveling Wilburys.
Hay veces que hay que darle la razón a las discográficas.