Torpedo Müller pasa por ser uno de los mejores delanteros centros de la historia. Fue un tipo de aspecto algo rechoncho y hasta paticorto pero que tenía un don especial para jugar al fútbol: meter goles fuera desde donde fuera.
Torpedo Müller, el bombardero de la nación
Nacido en Nörlingen en pleno final de la Segunda Guerra Mundial (1945), este futbolista ha sido uno de los emblemas de la mejor Alemania de los años 70 y del gran Bayern de Munich de esa misma década gracias a su instinto asesino de cara a gol. Torpedo Müller representaba el oportunismo personificado, el estar en el lugar oportuno en el momento adecuado.
Sin una gran técnica en sus piernas, todo lo fiaba a una potente sprint en pocos metros con los que dejar sentados a los defensas. Ello unido a su excelente juego aéreo y su gran disparo con las dos piernas le hacían temible. Para quiénes no hayan llegado a verlo jugar, basta decir que era una mezcla de Hugo Sánchez y Miroslav Klose. Pero también de Julio Salinas, porque si una cosa tenía el torpedo, era su capacidad para improvisar goles imposibles. Tanto era, que esta se llegó a inventar un verbo en alemán (müllern) para definir sus rocambolescas jugadas que acababan en gol.
Torpedo marcandole nada más y nada menos que a la “Araña Negra”. FOTO: Archivo MarcaLos inicios del “torpedo” no fueron fáciles. A pesar de debutar en el equipo de su región natal, el TSV 1861 Nörlingen, su citado aspecto físico de apariencia “dominguera” (a su 1.76 cm había que añadir sus 84 kilos en sus inicios, que luego se quedaron en 68) le dificultó sus comienzos. De hecho, era víctima de numerosas críticas entre los compañeros por su físico.
Sin embargo, a base de goles y potencia y fuerza, Müller consiguió apaciguar las críticas iniciales y convertirlas en halagos, hasta que en 1964 con tan solo 19 años fue fichado por el Bayern de Munich. En el club bávaro, “el bombardero de la nación” se iba a convertir en un mito a lo largo de sus quince años de trayectoria en el club gracias a sus tantos. Todo eso a pesar de que nada más llegar el entrenador del equipo Zlatko “Tschik” Cajkovski le soltó “¿qué hago con un levantador de pesas?”
Un goleador de leyenda
En 1002 partidos con el club muniqués iba a conseguir anotar la friolera de 1256 goles, saliendo a un promedio de 1.25 tantos. Una barbaridad que se tradujo en un sinfin de títulos donde destacan tres Copas de Europa, cuatro Bundesligas, cuatro Copas, una Recopa y una Intercontinental. Todo ello, eso sí, con la ayuda de compañeros de Frank Beckenbauer o Sepp Meier que hacían las cosas mucho más fáciles. A nivel individual, los 15 años en Munich dejaron siete trofeos de máximo goleador de la Bundesliga, 4 de la Copa de Europa, así como dos botas de oro (1970 y 72) y un balón de oro (1970).
Müller en la final del Mundial de 1974.Pero si espectacular fue su trayectoria con el Bayern, más aun lo fue con la selección alemana de principio de los años 70. En 62 apariciones con la Mainschaft logró anotar 67 tantos, pero lo más importante es que esos goles permitieron levantar la Eurocopa del 72 y el Mundial del 74. No en vano, marcó dos goles en la final de la Euro 70 contra la URSS y el tanto decisivo en la final del campeonato mundial del 74 ante Holanda(en un gol muy suyo). Además, acabó como máximo goleador en el Mundial del 70, donde Alemania acabó eliminada en semifinales por Italia pero en donde Müller metió 10 goles.
Jugó en EEUU al final de su carrera
En 1979, el “Torpedo” decidió dejar el fútbol de primer nivel para irse a probar fortuna en la LFS de Estados Unidos donde con el Ford Lauderlale Strikers jugaría tres años. Allí, dejó su imprenta de gran goleador, con 40 goles en 80 encuentros. Era el punto final para un jugador que se despedía de los terrenos de juego en 1981.
Alcohol, depresiones y Alzheimer
A partir de ahí los continuos problemas con el alcohol y las depresiones marcaron su vida, hasta que fue repescado de nuevo por el Bayern de Munich. Y es que como él mismo dijo, “como estar en el Bayern no hay nada igual”. Hace unos años su nombre saltó de nuevo a la palestra tras superar Messi su récord goleador en año natural, aunque Torpedo Müller se lo tomó con mucha filosofía y posó con la camiseta del astro argentino.
Torpedo Müller posó con la camiseta de Messi tras ser superado su récord por el argentino. FOTO: AsLa muerte de Torpedo Müller
Un 15 de agosto de 2021, Müller nos dejaba para siempre tras 6 años de enfermedad desde que le fue diagnosticado un Alzheimer en estado avanzado. Pero los amantes del fútbol y los historiadores, jamás olvidarán los goles del Torpedo.