Pierre Menard, autor del Quijote fue escrito casi veinte años antes que el cuento firmado por Borges; su autor, el italiano Giambattista Grozzo. El relato fue publicado por Il frizzo, una oscura revista humorística donde hiciera sus primeras armas Italo Calvino.
Estos datos son consignados por el profesor Salvatore Ragni en el número 877 de la Ricerca de Milán, 1973, y han pasado tan desapercibidos para nosotros como el relato de Grozzo.
Ragni se pregunta por la identidad real de Giambattista Grozzo —quien, al parecer, no ha dejado otros rastros—; sospecha de uno de los tantos seudónimos del joven Calvino. El mismo Ragni sostiene que Borges se limitó a traducir el relato de Grozzo, con muy pequeños retoques adaptativos, impresionado tal vez por la teoría de la “reescritura” que el propio cuento propone; y el resultado final, el Menard de Borges, sería en realidad la puesta en práctica de esa teoría.
La oscuridad de la obra elegida por Borges (pero, agrega Ragni, realmente no podría haber sido otra, para crear esa fantasmagoría o cajas dentro de cajas o sucesión de imágenes que se repiten al infinito en un juego de espejos) ha impedido hasta ahora que el juego rinda toda su eficacia; recién a partir del rescate del relato original de Grozzo —rescate probablemente esperado por Borges en silencio durante años— se completa un ciclo y la otra, el Menard de Borges, cobra toda su dimensión.
En el número 879 de la misma revista, un lector pregunta a Ragni si el misterioso Giambattista Grozzo no sería en realidad un seudónimo de Borges, quien habría preparado el juego de espejos, en complicidad con Calvino, casi veinte años antes de dar a conocer su versión en español de Pierre Menard, autor del Quijote.
Nosotros, como siempre, nos limitamos a señalar los hechos, sin abrir opinión.
Mario Levrero
Giambattista Grozzo, autor de “Pierre Menard, autor del Quijote”
La cervantiada
Editorial: Ediciones Libertarias
Foto: Italo Calvino y Jorge Luis Borges