Philipe Gilbert ha sido el enecargado de llevarse esta edición del Mundial de ciclismo, donde Boasson Hagen y Alejandro Valverde han acabado segundo y tercero respectivamente.
España y Bélgica, las dos selecciones más potentes, fueron las encargadas de controlar un poco la carrera y llegar bien a los sitios que a ellos les interesaba, es decir, llegar a Cauberg con un pelotón de elegidos y jugársela ahí con sus mejores bazas. Allí, ninguno de los españoles entró bien posicionado. Fue Gilbert quien decidió marcharse en solitario. Mientras, no había ningún corredor ayudando a Óscar Freire para que el cántabro pudiera disputar el sprint.
De todas formas, todos sabemos cómo va el ganador cuando se pone a sacudirle. A lo mejor se haya dicho de él que este año ha rendido poco. En cierta medida, es verdad, no ha ganado tanto como el año pasado. Pero esta victoria vale como unas cuantas, ¿no? Por detrás de él iban Boasson Hagen y Alejandro Valverde, disputándose los puestos. El murciano apretó poco después de que su rival se marchase, por lo que ya fue incapaz de darle caza.
¿Qué pasa con nuestra Selección? No estuvo nada mal, colocando bastante bien a sus corredores, aunque habría que cambiar un poco el final, la situación en la que Óscar Freire en el final, para poder disputar en condiciones un sprint. Por el resto, no pongo ningún "pero".
Hay que destacar que Freire ya ha acabado su carrera deportiva, pues, ya lo había avisado, diciendo que, de no ganar, se retiraría del ciclismo. Y así ha sido. Un grande que se retira.