El paraíso alternativo del backpacker y del turista que se ve abrumado en Bali, también es el destino del que quiere drogas (ya lo explicaré), el que quiere bucear, el que quiere buena fiesta y el que simplemente quiere relajarse en playas de arena blanca y aguas turquesas transparentes, aquí lo tienes todo.
En las Gili encuentras todo esto. Se trata de 3 pequeñas islas, y cuando digo pequeñas es que son muy pequeñas. La mayor de todas, Gili Tarawangan, donde yo me quedé se puede bordear andando por la playa en menos de hora y media, con una única calle donde se encuentran los bares y restaurantes, además de las escuelas de buceo.
Las otras dos islas son Gili Air, y Gili Meno. Son más tranquilas que Gili Tarawangan. En Gili Tarawangan la fiesta cada noche llega a altas horas de la mañana, donde los más fiesteros se cruzan de camino a la cama con los buceadores más madrugadores.
Vuelvo al tema drogas para explicar un par de cosillas sobre Indonesia (aplicable a Malasia, Singapore y Brunei).
En Indonesia las drogas están prohibidas. Pero las leyes son de lo más estrictas. La posesión de la mínima cantidad de droga supone 5 años de cárcel prácticamente inapelables. Pero si el sujeto en cuestión es pillado con una pequeña cantidad de droga, que exceda unos pocos gramos ya sea de marihuana, hachís y no digamos cocaína, la pena de muerte es segura. Con estas cosas no se juega.
Pero en las Gili no hay policía, no la hay por tratarse de tres islitas tan pequeñas. Y por lo tanto, la marihuana se vende por doquier casi a grito pelado. De ahí que a estas islas también las visiten gente que no puede pasar un día sin un porro.
Pero curiosamente las setas alucinógenas si son legales, y es el otro gran negocio de Gili. Todos los bares venden batidos de setas, tortitas de setas que “te llevan a la luna” como promocionan. Hasta tienes servicio a domicilio…
Bueno, lo mejor de las Gili es que encuentras lo que quieres, cada uno va a lo suyo y nadie se mete con los demás.
Mañana la otra parte de la isla, la del paraíso, para mi, mucho más atractivo y desde luego menos peligroso!