Cumpliría 101 años este 16 de julio; Ginger se convierte por méritos propios en nuestro icono Vintage de Julio.
Ginger debe su apellido al segundo marido de su madre, John Logan Rogers, y su nombre a que uno de sus primos, incapaz de pronunciar su verdadero nombre, Virginia, acabó por llamarle Girga.
Ginger Rogers debutó con 14 años en un concurso, obteniendo el primer premio gracias a un simpático baile de Charleston. A raíz de ello comenzaría una gira de tres años con un teatro de variedades. Y después, poco a poco… llegaría la fama.
En sus más de 35 años de carrera hizo un total de 75 películas, aunque siempre será recordada por los musicales que realizó junto a Fred Astaire.
Hicieron juntos una serie de diez musicales, que revolucionaron el concepto de musical moderno en aquella época. Una pareja inigualable e insustituible. Todas sus coreografías han servido de inspiración para infinidad de números posteriores.
La pareja Ginger-Fred nació en “Volando hacia Río de Janeiro” (1933), donde se llevaron, con enorme facilidad, todo el protagonismo de la película. Os dejo el video de su famoso baile de la ‘Carioca’.
Años más tarde, en 1986, el cineasta Federico Fellini homenajeó a la inolvidable pareja en una de sus nostálgicas cintas, ‘Ginger y Fred’ (1986), donde los espléndidos Marcello Mastroianni y Giulietta Masina eran una pareja de bailarines. Ginger llevó el tema a juicio por utilización indebida de nombre e imagen.
Ginger siempre envidiaría a Katharine Hepburn. Cuando se anunció que su estudio iba a rodar María Estuardo en 1936, Ginger se apresuró a solicitar el papel protagonista, amenazando al productor con dejar de hacer musicales junto a Fred Astaire si no la concedían el papel protagonista. Tanto insistió que se le hizo una prueba, y aunque muchos de los presentes aseguraron que su interpretación fue magnífica, el papel fue para la Hepburn.
Por eso cuando años más tarde, en 1940, le concedieron el Oscar a la mejor actriz por su papel de Kitty Foyleen, “Espejismo de amor” , consiguiendo desbancar entre otras a Bette Davis por “La Carta”, Joan Fontaine por “Rebeca”, Katherine Hepburn por “The Philadelphia Story” y Martha Scott por “Nuestro pueblo”, se asegura que la ovación que recibió fue una de las mayores de la historia de la entrega de los Oscar.
Ginger se casó cinco veces pero nunca tuvo hijos, y no consiguió que uno solo de sus maridos la durara más de ocho años.
Está enterrada en el mismo cementerio que Fred Astaire.
Para despedirme de ella me quedo con las palabras de su madre:
“Antes de nacer ya bailabas. Podía notar tus talones golpeándome por toda mi tripa durante meses”
¡¡Y qué bien que lo hizo durante años!!
Tienda de pósters de Ginger