Sugerida por... Ricardo
Clarión
Gis, clarión o tiza son vocablos de los cuales todos conocemos el objeto que definen: ni más ni menos que una barra de yeso que se usa como lápiz para dibujar o escribir en los encerados o pizarras de las aulas.
Es curioso, e incluso puede parecer contradictorio, que el material con el que escriben todos los niños del mundo en las pizarras se conozca típicamente en México como gis -del latín gypsum, yeso- y en España sin embargo en vez de favorecer el término de origen latino, sea conocido como tiza -del náhuatl (lengua que se habla en diversas zonas de México, con muchas variantes dialectales) tizatel-
...No olvidemos, por cierto, que la otra voz mencionada en el primer párrafo -clarión- procede del francés crayon (lápiz)...
A modo de ejemplo de uso hoy reproducimos un fragmento de Traer a cuento, obra del ensayista y periodista español José de la Colina (1934):
“…Estaba a punto de hacerlo cuando se dio cuenta de que para gran disgusto suyo había sido víctima de un descuido deplorable: se le había olvidado la tiza —el gis diría el mexicano— quizá más importante de todas: la de color blanco. Estaba deprimido y desesperado. Miraba a su alrededor en busca de alguna solución. De pronto se echó a “reir a grandes carcajadas” y con tal estrépito que las vacas se le quedaron mirando y terminaron rodeándolo…
¡Hasta el próximo dibujo en la pizarra del conocimiento! ;-)
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