A Gloria Fuertes le sucedió lo que a muchas mujeres a lo largo de la Historia, en todos los órdenes, y que tan bien resume Camilo J. Cela: " la angélica y alta voz poética a la que los hombres y las circunstancias putearon inmisericordemente"
Gloria Fuertes nace en Lavapiés, estudia en la Escuela Profesional de la Mujer,sic( higiene, mecanografía, puericultura...), trabaja en una fábrica, redactora en revistas infantiles, como secretaria, como bibliotecaria en un Instituto, etcétera, hasta que acaba dando clases de Literatura en varias universidades de los EEUU( "la primera vez que entré en una Universidad fue para dar clases en ella").
Durante todo este ajetreado y prosaico periplo vital, se dedica a escribir poesía infantil, juvenil y adulta, teatro para niños, calambures, nanas, adivinanzas, cuentos, colabora en TVE en programas infantiles como "Un globo, dos globos, tres globos"...
Pero todo esto lo cuenta Gloria de forma magistral en su:
AUTOBIOGRAFÍA
Gloria Fuertes nació en Madrid
A los dos días de edad,
Pues fue muy laborioso el parto de mi madre
Que si se descuida muere por vivirme.
A los tres años ya sabía leer
Y a los seis ya sabía mis labores.
Yo era buena y delgada,
Alta y algo enferma.
A los nueve años me pilló un carro
Y a los catorce me pilló la guerra;
A los quince se murió mi madre, se fue cuando más falta me hacía.
Aprendí a regatear en las tiendas
Y a ir a los pueblos por zanahorias.
Por entonces empecé con los amores,
-no digo nombres-,
gracias a eso, pude sobrellevar
mi juventud de barrio.
Quise ir a la guerra, para pararla,
Pero me detuvieron a mitad del camino.
Luego me salí una oficina,
Donde trabajo como si fuera tonta,
-pero Dios y el botones saben que no lo soy-.
Escribo por las noches
Y voy al campo mucho.
Todos los míos han muerto hace años
Y estoy más sola que yo misma.
He publicado versos en todos los calendarios,
Escribo en un periódico de niños,
Y quiero comprarme a plazos una flor natural
Como las que le dan a Pemán algunas veces.
El amor y pasión de Gloria- solterona, desaliñada, gran bebedora, fumadora compulsiva, noctámbula, solitaria, desordenada, luciendo siempre bien y entrañable con su corbata y chalecos de hombre- fueron siempre los niños, y a ellos dedico gran parte de su extraordinaria obra literaria, su faceta quizá más conocida y valorada públicamente, aunque en su menos estimada vertiente de poetisa para adultos Gloria fue donde realmente se convirtió en esa "alta voz poética" que mencionaba Don Camilo.
Militante del Postismo, de la Poesía de Posguerra, colaboradora en numerosas revistas poéticas, Gloria siempre tuvo muy clara una cosa: " la útil expresión es más importante que la inútil perfección". Ésta es la piedra que yo considero, personalmente, angular de su trabajo. La argamasa básica con la que creará y estructurará toda su rutilante obra poética adulta.
Entre los chispeantes y geniales títulos de sus poemarios- "Cuando amas aprendes geografía", "Es difícil ser feliz una tarde", "Pecábamos como Ángeles", " Se beben la luz"...- se encuentran agazapados animales íntimos, profundos y cotidianos,¡¡ tan nuestros!!, como la soledad, el desamor, la muerte, Dios, el dolor, la esperanza, incluso el suicido...
VIENE LA AUSENCIA
Viene la Ausencia
a llenarnos de piojos, de tristeza,
a meternos de patas en la acequia,
acomernos la paz de la despensa;
viene la Ausencia
y nos ultraja encima de la mesa,
y se acerca
las costras de su lepra,
se sacude su capa de miseria
y nos deja garrapatas de angustia
arácnidos de pena.
Viene la Ausencia
y nos deja de pasto de la niebla,
es decir, ahogados en la arena.
Y el deseo de viste de vino
y el vino de pena
y la pena de soledad
y la soledad se disfraza de tristeza
y la tristeza otra vez de soledad,
y la vecina de enfrente no entiende
nada de este carnaval.
Y también la poesía más recia y social, más comprometida con los seres humanos, con la libertad extirpada, voz cómplice de las fatigas que sufren los que nada poseen, lucha muda y en negro sobre blanco contra la adversidad de un orden social injusto y cruel.
PALIDUCHAS
Qué palidas están,
son como cuartillas
flotando entre las aguas de la pena,
van y vienen riéndose o llorando;
algunas tienen hijos,
todas, greñas;
tienen la carne blanca...
Estas locas son muertas,
que las sigue latiendo el corazón
debajo de las tetas.
Su voz es clara, nítida, palpitante, retratando con ello un mundo poético interior fascinante y vasto. Sus versos frescos, ágiles, como creados en cascada, en medio de una febril efervescencia creativa, siempre con el único recurso por delante de ese talento-que no se aprende ni se estudia en ninguna academia o Universidad- para convocar la palabra precisa, el verbo oportuno, la imagen correcta, pariendo y radiografiando así ciertos sentimientos y emociones que habitan en el interior de los seres humanos pero que la mayor parte no sabe verbalizar, sacar a la luz para ser vistos o leídos por los demás.
"Gloria Fuertes aúlla como una loba herida de muerte.. sus versos son desconsolados y atroces, saludables y humanos, mortales de necesidad y amargamente sobrios y juguetones como el diablillo de la guarida, al que esta mujer quiere peinar los cuernos"( Camilo J. Cela)
La llamada "poetisa de los niños" murió un 27 de noviembre de 1998. Los que la conocían dicen que enferma de cuerpo y soledad.
Siempre con esa contradicción a cuestas de conocer y morar tan cerca de los hombres y a la vez residir tan lejos de ellos, tan sola, con el otoño siempre latiéndole por dentro.
Con ustedes una de las más grandes voces poéticas de la posguerra española: mi admirada Gloria Fuertes.
Háganse un favor, y disfrútenla como se merecen ustedes y ella. Y así todos ser un poco mejores.
AL BORDE
Soy alta;
en la guerra
llegué a pesar cuarenta kilos.
He estado al borde de la tuberculosis,
al borde de la cárcel,
al borde de la amistad,
al borde del arte,
al borde del suicidio,
al borde de la misericordia
al borde de le envidia,
al borde de la fama,
al borde del amor,
al borde de la playa,
y, poco a poco, me fue dando sueño,
y aquí estoy durmiendo al borde,
al borde de despertar.
Saludos de Jim.