Y es posiblemente a través de ese interés por la construcción de su propia identidad como mujer, desde donde arriba Gloria Herazo a las preguntas que realiza a esas otras mujeres que habitan sus obras, unas veces niñas, otras adolescentes, las más de las veces adultas. Representaciones y/o auto-representaciones. La artista rompe la linealidad temporal para re-situarse y verse a sí misma en otras épocas, como su abuela, como la pequeña que fue; para desdoblarse en múltiples roles: abuela, madre, niña, muñeca, hija, hermana. Como una y muchas, en su particularidad y en la abstracción del género enunciado socialmente. Seriada, estándar y repetible, reproducible como si de una copia vaciada de un molde se tratara. Resultado de un orden instrumental perfilado en una educación católica y patriarcal dictada por un sujeto que pretende emular al «occidental, blanco, burgués, heterosexual, varón, racional»Una mujer cuyas funciones son prefijadas desde la cuna, cuyo espacio es signado y acotado per se, espacio para la recreación de los roles protectores y maternales concebidos como propios del sexo femenino.
En sus lienzos las mujeres son des personificadas, devienen maniquíes a los que se les ha puesto ropas y se les ha colocado en la pose adecuada, como adornos, inmóviles, perfectos, correctos, cuidadosa y férreamente entrenados. Ellas son méritos que se exhiben como cualquier otro trofeo, el testimonio y la prueba de un acto de "hombría". Pareciera que estas mujeres han sido desprovistas de su humanidad y subjetividad, sus cuerpos no revelan una constitución anímica, la carne se ha vuelto de cera, como muñecas condenadas al hieratismo prescrito en una dictadura doméstico-familiar. Pero es por medio de la reconstrucción de esa pasarela de modelos femeninos que Gloria Herazo aborda el pasado. Interviene en un paisaje generacional para buscar en otro tiempo, explorando la memoria personal para descubrir los pilares axiológicos sobre los que se implantó su educación y se abocetó su identidad. Ser mujer emigrante y madre, son razones de peso para organizar esa expedición a la memoria individual y transformar los recuerdos, la memoria personal o colectiva, en material estético, para convertirlos en un recurso con el cual mediar en la realidad presente y resistir frente a la alienación del desplazamiento, la discontinuidad de una narrativa íntima. En ese sentido, la obra existe como espacio hermenéutico, expresión de «Sí mismo como otro».Es en esa dialéctica de re-apropiación y asociaciones críticas donde emerge la posibilidad de distinguir entre el personaje de la narración y/o reconocerse como personaje de la narración.
El asunto a dirimir aquí es: ¿quién está observando?
Texto escrito por, Suset Sánchez.
Historiadora del Arte. / La Habana, Cuba.
Programadora Cultural, IMAE, Madrid, España
EXPOSICIÓN PINTURAS GLORIA HERAZO
Galería Angel Romero ( Calle San Pedro 5 , Madrid )
Desde el 29 de abril hasta el 25 de junio de 2011.
Entrada gratuita
http://www.galeriaangelromero.com/exposiciones.php
( FOTOS Y TEXTO FACILITADOS POR LA GALERÍA ANGEL ROMERO )