Golpe de estado mediatico.

Mariano Rajoy no ha activado el artículo 155 sino que ha liquidado de un plumazo la autonomía de Catalunya, algo contradictorio con el texto del 155. ¿Por qué será que los que se autodenominan constitucionalistas son los que más se toman la Constitución a cachondeo y hacen con ella lo que les da la gana?.

Nada de lo que Rajoy pretende hacer en Catalunya está escrito o ni tan solo justificado en el artículo 155, y tampoco está escrito que deba eliminarse totalmente la autonomía, que es lo que Rajoy está haciendo.

Al cancelar totalmente en la práctica la autonomía de Catalunya Rajoy no solo incumple el texto del 155 al que solo utiliza de excusa, además al anular totalmente la autonomía de Catalunya incumple el artículo 2 de la Constitución, el que garantiza el derecho a la autonomía de las nacionalidades y regiones, y curiosamente, el mismo artículo que utilizó para ordenar al Tribunal Constitucional que suspendiese el referéndum mientras decidían sobre su inconstitucionalidad y fue usado para aplicar artículos del código penal derogados en 2005. Todo muy legal.

A pesar de ello toda la pocilga mediática ha aplaudido a rabiar la nueva barbaridad de Rajoy, la misma pocilga mediática que es responsable de que en el resto de España, la mayoría de españoles tengan una opinión sobre Catalunya basada en mentiras, difamaciones y algún insulto.

La irresponsable fábrica de Catalanofobia que el PP activó con la pocilga mediática es el producto de una operación que se inició con la Ley del sector eléctrico de 1997, que constituyó un verdadero golpe de estado mediático.

En la nota EL REGRESO DE DARTH VADER del 25 de Mayo 2013, decía lo siguiente:

[El Sr. Aznar, esta vez de la mano del ministro Piqué, parió la Ley 54/1997 de 27 de noviembre del Sector Eléctrico, con la que regalaron 12.000 millones de Euros a las compañías eléctricas, factura que todavía estamos pagando y que aumenta cada día, como compensación por el fin de un oligopolio que todavía perdura, compensación no justificada ni legal ni contractualmente. En resumen un pequeño regalo porque sí. Pocas veces se han dado mejores ejemplos del perfecto funcionamiento interno de la Oligarquía que manda y domina este país, porque tamaña barbaridad, que en cualquier país civilizado habría sin duda provocado una tremenda crisis, aquí solo causó críticas airadas de algunos comentaristas.

Dada la evidente y notable honestidad tanto del Sr. Aznar como de las empresas eléctricas no puede ni remotamente suponerse que hubiese pacto previo, pero, por absoluta casualidad, después de la entrada en vigor de la Ley del sector eléctrico sus principales empresas efectuaron varias inversiones hasta el máximo permitido por la Ley en medios de comunicación de nueva creación y otros ya existentes de lo que en Catalunya llamamos la caverna mediática, que, también por absoluta casualidad, es incondicional de José Mª Aznar, y que gracias a aquella inyección de capital y otras aportaciones del mismo estilo se transformó en el mayor grupo de presión mediática del país.], o sea que encima el PP construyó la pocilga mediática con nuestro dinero.