Esclarecedor Gran Premio el de Abu Dhabi, donde todas las cosas que pienso acerca de la F1 actual se vieron demostradas sobre el circuito. Imponente escenario en los Emiratos Árabes Unidos, donde los petrodólares son capaces de convertir un desierto en un oasis de lujo ilimitado. Así nació el Yas Marina Circuit en 2009 con un trazado impecable, tecnología de vanguardia y un marco visual deslumbrante.
Pero volviendo a lo deportivo, empecemos por el principio que es siempre lo mejor.
Kimi Räikkönen fue el último ganador en Abu Dhabi 2012. Hoy fue el primero en abandonar el circuito, en la primera curva de la primera vuelta. El de Lotus está terminando el año a los tumbos a pesar de que su escudería ha mostrado una mejora sustancial desde comienzo de temporada.
El finlandés se veía relegado a la última posición de salida después de la sanción de la FIA debido a no respetar los márgenes de horizontalidad requeridos para el fondo plano del coche. En pocas palabras y totalmente por mi cuenta, Kimi se rebeló contra su equipo y éste lo boicoteó para mandarlo al fondo de la grilla, incluso a costa de valiosos puntos para el campeonato. No hay manera de que esa diferencia de altura entre ejes delantero y trasero sea accidental, por eso la FIA actuó, tampoco hay manera que sea culpa del piloto. Blanco y en botella.
Si bien las circunstancias perjudicaron a Kimi, también él mismo realizó una maniobra innecesariamente arriesgada al meterse por una trazada imposible en la primera curva y romper la suspensión de su Lotus contra el Caterham de Van der Garde.
La inestabilidad y profesionalismo ambiguo de “Ice Man” son los factores que siempre le jugaron en contra de su innegable talento natural, veremos cómo funciona este cóctel en Ferrari el año próximo y con Alonso de compañero.
Red Bull. Ya con ambos campeonatos en el bolsillo todo estaba servido para Webber que, como en Japón, partía desde la pole. Pero, pero pero… el eunuco no pudo con la carga, una vez más. Creo que ya debe ser oficialmente el peor largador de la F1. Carente de toda agresividad, instinto asesino, deseos de victoria, ya estará pensando en su granja de canguros y la jubilación.
El australiano no solo perdió el primer lugar sino también el segundo. El abuelo se duerme y en las largadas espera a que le piten los de atrás antes de acelerar. Está bien, para qué arriesgarse a ir rápido cuando te quedan dos GP si no lo hiciste en toda tu carrera. Eso sí, cuando faltan pocas vueltas para terminar la carrera y la medicación ya le ha hecho efecto, se acuerda de que va sobre el coche más rápido de la parrilla y empieza a hacer vueltas rápidas, superar rivales y hacer lo que debería haber hecho antes: correr. Aunque os parezca mentira, no tengo absolutamente nada contra Mark Webber y la opinión que emito sobre él es sólo deportiva, personalmente lo conocerán mejor sus amigos, como espectador me parece un buen tío pero con el número 2 tatuado en la frente. En definitiva, como decía el filósofo Gregorio Casas: "Si eres feliz así, yo..."
Webber y Vettel, parece que ni la luz les ilumina por igual
Y el que no falla es el “superpiloto automático” Sebastian Vettel. No hay caso, no me despierta ningún respeto este supuesto mesías de las pistas. Lo sientan en el mejor auto que se haya hecho en la historia de la F1 y él acelera. Solo necesita pista libre por delante y un coche ridículamente más rápido que los demás.
Y que nadie me venga a decir que en India arriesgó y se fue a mitad del pelotón para luego superar a todos porque eso sería una tontería monumental. En el pasado GP de Nueva Delhi nadie le opuso resistencia, y no hablo ya de los Toro Rosso que son primos hermanos, sino de ningún otro equipo de los que se encontró por delante. Todos los ingenieros decían por radio a sus pilotos: “Detrás viene Vettel, no corremos contra él, dejadle pasar”… está grabado.
Lo cierto es que el alemán acumula records y títulos, rompiendo marcas que a pilotos históricos les costó años de sudor y lágrimas conseguir. Todo de un plumazo, en cuatro años consecutivos y sin despeinarse. Mientras a todos les piden que aceleren, que presionen más a él no paran de pedirle que frene, que baje el ritmo, que no muestre todo de lo que es capaz el RB-9. Hoy su ingeniero le suplicaba que cuide los neumáticos, cuando en realidad eran los que mejor estaban de todo el plantel y además tenía tiempo de sobra para hacer dos paradas extra seguidas sin perder la punta. Blanco y en botella (parte II).
Ferrari. Después de la clasificación de ayer pensé que el equipo de Maranello ya había bajado los brazos. Eso no lo sé, pero estoy seguro de que Fernando Alonso seguirá luchando, por testarudez, por orgullo o hambre de gloria y no imagino verlo claudicar ante ningún rival por más superior que parezca. Ese es el espíritu.
El asturiano partía desde la 10º posición después de una Qualy para el olvido. Salió a pista con el cuchillo entre los dientes, como deberían hacerlo todos para deleite de los espectadores. Fue quien más adelantamientos realizó, quien más atacó, se quedó con la vuelta rápida de carrera y finalizó 5º. Siempre al 120%.
Felipe Massa, que partía desde el 7º lugar, logró llegar 8º. El brasileño es otro que lleva tatuado “#2” bien grande en medio de la frente y bien puede marcharse de Ferrari para irse a otro equipo o para montarse un chiringuito de “caipirinhas” que nadie va a notarlo en las carreras.
Este es otro que no me cae mal personalmente, todo lo contrario, pero tengo que centrarme en el aspecto competitivo. Para quienes sean amantes de las estadísticas, comparando resultados en clasificación el balance Alonso-Massa es de 10 – 7 (veces que uno quedó delante del otro). Pero si hablamos de carreras, entonces el margen se amplía hasta un 15-2 a favor del asturiano. Blanco y en botella (parte III)
Mercedes GP. A pesar de su rendimiento desigual, siguen dando pasos pequeños pero firmes para quedarse con el segundo puesto en el campeonato de constructores y consiguiendo más puntos que su inmediato competidor, la Scudería Ferrari. A principio de año todos creían que Hamilton dominaría ampliamente a su compañero, Nico Rosberg, sin embargo no está tan clara la cosa. Luego de 17 grandes premios y con 50 puntos aún en juego, el británico sólo tiene una ventaja de 17 unidades sobre el alemán, que obtuvo mejores resultados que su compañero en 5 de los 6 últimos GP. Hoy en Abu Dhabi finalizaron 3º Rosberg y 7º Hamilton.
Grosjean clasificó 7º pero arrancó 6º gracias a la sanción aplicada a su compañero Räikkönen. Mantuvo buen ritmo y finalizó 4º sin muchas estridencias. El piloto francés y el equipo Lotus han repuntado mucho últimamente y ya no es tan raro verlos adelante.
Los Force India de Di Resta y Sutil se metieron ambos en zona de puntos finalizando 6º y 10º respectivamente. Ambos se vieron involucrados en situaciones riesgosas similares durante la carrera, que fueron analizadas por los comisarios sin consecuencias para los pilotos.
McLaren logró meter uno de sus coches dentro de los puntos, el de Sergio "Checo" Pérez, en el 9º puesto mientras que Button quedó 12º, lejos de toda aspiración.
Creo que a pesar de que el campeonato ya está acabado, la carrera de hoy mereció la pena verse, sobre todo para los más fanáticos. En dos semanas volamos para América y así encarar la fase final de la temporada en Estados Unidos y Brasil.
Posiciones finales del Gran Premio de Abu Dhabi 2013
Puzzle Bobble
Karate Blazers
Puzzle De Bloques
Magical Cat Adventure