No sé muy bien qué estaba grabando aquí nuestro amigo, un camión sin cargamento pero que tampoco tiene nada de especial. Pero al cabo de unos segundo (0:30) consigue grabar uno de esos sustos que te puedes llevar conduciendo y que no logras olvidar en mucho tiempo. No te cuento exactamente qué sucede, para que te lleves el mismo susto que me he llevado yo:
La casualidad ayudó a que quedara grabado, pero la suerte le libró de perder la cabeza. Menudo susto!