Gracias al PP, Vox aupa los perfiles más ultras a puestos institucionales y de influencia.

El futuro 'president' de la Generalitat, Carlos Mazón y la nueva presidenta de las Cortes de Valencia,Llanos Massó.

Gracias al consentimiento del PP, Vox no ha desaprovechado la oportunidad para aupar, en varias comunidades autónomas, a sus perfiles más ultraconservadores. Así lo hizo con Llanos Massó, en Valencia, con Marta Fernández, en Aragón, y con Gabriel Le Senne, en Baleares, colocando a políticos con posicionamientos negacionistas y machistas. La diputada antiabortista, Llanos Massó, fue elegida presidenta del parlamento autonómico gracias al apoyo de los diputados del PP. Durante la legislatura anterior, la dirigente autonómica de Vox centró sus comparecencias en cargar contra las políticas de igualdad de género y contra los derechos del colectivo LGTBI, especialmente en materia de educación sexual. En esta línea, también abogó por la introducción del 'pin parental' en las aulas. Hace unos meses, acudió a una sesión del parlamento valenciano con una fotocopia de varios dibujos de penes que, según denunció, figuraban en libros disponibles en las bibliotecas escolares.

Días antes, se repitió en Aragón idéntica actuación. Los populares apoyaron la elección de la diputada de Vox, Marta Fernández, como presidenta de las Cortes de Aragón. La designación de Fernández como presidenta de las Cortes aragonesas coincidió con la decisión de la diputada de Vox de borrar el contenido de sus redes sociales. El rastro de sus mensajes desvelaba comentarios tránsfobos, negacionistas y antifeministas. En 2021 se dirigió de la siguiente manera a las “feminazis”: “Sois las nietas de los cristianos que echaron a los moros de la península para que pudierais pasear en tetas por la calle”. Fernández aseguró que la ministra de Igualdad, Irene Montero, no sabe “nada de la vida”, solo “arrodillarse para medrar”. Fernández también desplegó la foto de un feto desde la tarima de las Cortes en la legislatura anterior para reivindicar sus posicionamientos antiabortistas.

En Baleares, el perfil del presidente del Parlament balear, Gabriel Le Senne, sigue entre polémicos comentarios, al sostener que “las mujeres son más beligerantes porque carecen de pene”. Como sucedió en Aragón y en Valencia, el nombramiento de Le Senne también fue votado por el PP. Además de comentarios machistas, los mensajes y artículos del nuevo presidente de la Cámara balear difunden tesis negacionistas del cambio climático, de la violencia de género o de la eficacia de las vacunas contra la Covid-19. Después de que se hayan hecho públicos estos mensajes, Le Senne asegura que se han “sacado de contexto”. Y lamenta que se esté “trasladando una imagen” de él que “la gente que le conoce sabe que no es real”.

En otras administraciones como en el Ayuntamiento de Torrelodones, el nuevo Ejecutivo local, conformado por PP y Vox, con la controvertida Almudena Negro a la cabeza, ha hecho saltar las alarmas al aprobar una importante subida de los sueldos de los concejales, del personal de confianza y de la propia alcaldesa. Varios medios locales confirman que el gasto ha pasado de 484.509 euros anuales a 1.115.239 euros, es decir, con un incremento de 670.730 euros. Un aumento salarial para la primera edil de casi 6.000 euros (ahora, superará la barrera de los 62.000 euros anuales, cuando el anterior alcalde cobraba 56.370). Al mismo tiempo, el nuevo gobierno contrató un total de siete asesores, cuando en la anterior legislatura no había ninguno. Por su parte, Vecinos por Torrelodones, el partido que gobernaba con mayoría absoluta hasta las elecciones de mayo, redactó una nota de prensa en la que afea el incremento de gasto del gobierno local.

Otro de los perfiles que ha aupado Vox en esta nueva etapa, es el del torero Vicente Barrera, que gestionará asimismo las competencias de Cultura. Será el segundo vicepresidente autonómico que logre la formación. Barrera se ha convertido en el hombre fuerte del partido en Valencia, tras la salida de Carlos Flores como cabeza de lista al Congreso debido a su condena a un año de prisión por violencia machista en 2002.