Si el año pasado teníamos un Día de la madre inusual este al menos va a ser la revancha. Bueno, o eso pensaba yo hasta que en el colegio decidieron que quieren cambiar el día de la madre y del padre por “el día de la familia” y en lugar de celebrarlo con regalos / manualidades celebraban una gymkana con los padres... este año con las restricciones de actividades familiares el acceso al colegio está restringido así que me quedo sin collar de macarrones, marcapáginas con corazones o adornos de coche con fotos. ¡Yo quiero mi regalo del día de la madre! Y si es posible que sea un IPhone nuevo que lo tengo muy roto o el Pokemon Espada que las madres también jugamos a las consolas como dicen en la web de PC Componentes ¡sólo faltaba! Vamos, un regalo acorde al nivel de las trastadas que llevan perpetrando desde bebés. Voy a recopilar mis favoritas...
1. El Picasso del Salón y el mapa del tesoro de la habitación.
Este es un clásico, niños pintando en las paredes con rotuladores permanentes. Lo que es un misterio es cómo encuentran el rotulador más dañino en el último cajón de la casa. Es que lo huelen. ¡Ojo! No sólo eso, es que alcanzan alturas nunca vistas, es pensar en hacer una pintura rupestre y pueden subirse a superficies para poder hacer un mural de 2 metros pero luego les tienes que alcanzar cualquier cosa que está en la mesa auxiliar porque “no llegan”. Yo no lo entiendo.
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2. Tú me das cremita.
¿Sabes lo que cuesta quitar un frasco entero de crema Nívea de las superficies de objetos tan variados como un pijama de felpa, el suelo de media casa o el pelo de un niño. Yo sí, no te lo recomiendo. Creo recordar que ese pijama en concreto llegó a jubilarse con dos lamparones perennes imposibles de erradicar ni con los productos más novedosos del super.
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3. En el cole.
Cuando parecía que en el cole habíamos logrado llegar a ser normalizó llega y consigue sorprenderte. yo de pequeña mutilé un baby de una compañera por amor al arte pero es que mi criatura roza lo absurdo y decidió reformar su propio uniforme con unas tijeras. Lo increíble es que he tenido en la mano esas tijeras y me ha costado l ávida corte una cartulina de bajo gramaje ¿Cómo puede un moco de 4 años cargarse la manga de un chándal con esas tijeras infantiles? O lo que es peor ¿cuánto tiempo tardó en conseguirlo? Lo que si os aseguro es que el uniforme fue reparado de forma totalmente artesanal (es decir fatal) y siguió usándolo hasta que le quedó pesquero, como castigo divino.
4. En el día a día.
Si encontrara todos los mandos a distancia desaparecidos, las cucharas que fueron al colegio y nunca volvieron, los libros que fueron mojados en la mochila por no cerrar bien las botellas, las partes de uniforme extraviadas en las instalaciones escolares y un largo etcétera de pequeños expedientes X de la vida diaria a parte de darme para poner una tienda de segunda mano de impresión seguro que me ahorraría muchos micro infártalos diarios.A pesar de todo esto hay que quererlos, nosotros también torturamos a nuestras madres así que mientras ellos nos dicen eso de ¡Gracias mamá! los mayores podemos hacer acto de contrición y acordarnos de las nuestras.